Una escultura de una vagina ha aparecido este lunes en una plaza del centro de la ciudad italiana de Nápoles (sur), como respuesta a una gran escultura fálica colocada hace semanas en el mismo lugar para sorpresa de los vecinos.

Una vagina cosida, un Miró de dos millones de euros (2.25 millones de dólares) o una instalación que convierte la propia sombra en colores: el laberinto de ARCO está lleno de propuestas para todos los públicos, de las más divertidos para los pequeños hasta las más sesudas para los entendidos.

La cirujana plástica Lina Triana, quien presentó su libro “El renacimiento de la vagina. Reivindicando a la diosa”, señaló que su texto es un estudio que da respuestas a una serie de interrogantes sobre el órgano genital femenino que va más allá de su función erótico-sexual.