El cerebro cuenta con partes específicas que discriminan, procesan y categorizan el sonido; ello le permite diferenciar lo agudo de lo grave, explicó Concepción Morán Martínez, profesora de las facultades de Psicología (FP) y de Música (FaM) de la UNAM.
La música se escucha con el oído, pero se aprecia con todo el cuerpo
