Un tribunal de Nueva York dictó este martes una contundente condena de 120 años de prisión para el líder y fundador de la secta sexual Nxvim, Keith Raniere, que aprovechó este supuesto grupo de autoayuda para abusar sexualmente de una larga lista de mujeres, por lo que en junio de 2019 fue declarado culpable de tráfico sexual, pornografía infantil y crimen organizado a la espera de una sentencia que llegó hoy sin clemencia.