Cumplir con el objetivo de unas emisiones netas nulas en dióxido de carbono (CO2) para 2050 necesitaría, entre otras cosas, prohibir las ventas de coches nuevos de combustión desde 2035, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Cumplir con el objetivo de unas emisiones netas nulas en dióxido de carbono (CO2) para 2050 necesitaría, entre otras cosas, prohibir las ventas de coches nuevos de combustión desde 2035, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).