Tlahuiltoltepec, once desaparecidos y miles de afectados

A más de 24 horas de la emergencia, el agua y el lodo no cesan su avance sobre este municipio de la sierra mixe, donde se realiza la evaluación de los daños, tras el alud que presumiblemente sepultó a 11 personas, pero cuenta por miles a los afectados.

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Habitantes y miembros de proteccion civil participan hoy, 29 de septiembre en las acciones de rescate y limpieza de escombros en la comunidad Tlahuitoltepec, Oaxaca, donde hay seis integrantes de una misma familia desaparecidos tras el alud.

Tlahui se está deshaciendo”, fue la expresión de Rogelio mientras sostenía el único teléfono satelital que aún los mantenía en comunicación con la capital del estado, luego que múltiples deslaves en la zona los dejaran sin red eléctrica, teléfonos, comunicación vía terrestre o aérea.

Y es que horas antes, dos helicópteros del gobierno federal habían intentado, sin éxito, aterrizar en la zona a fin de que funcionarios de este orden pudieran recabar la información de primera mano y enviar la ayuda a las víctimas del alud, que durante las primeras horas de este lunes se presumían en cientos.

Por tierra, la ayuda inmediata debía sortear derrumbes, deslaves carreteros y casi dos horas de camino a pie entre la montaña para llegar a Tlahui, como cariñosamente la nombran sus habitantes.

La lluvia en la sierra mixe no cesa y, sin embargo, cientos de comuneros, Bomberos, elementos de Protección Civil, Marinos y del Ejército no cejan en su intento por rescatar a las víctimas del deslave que la madrugada de este lunes detonó una alarma internacional por las intensas lluvias que han azotado a Oaxaca.

A pesar que la magnitud del siniestro se redujo conforme transcurrieron las horas, la alerta en Tlahuiltoltepec no cesa.

El temor de la población se respira entre los casi tres mil habitantes de la cabecera municipal, donde más de 60 casas corren el riesgo de venirse abajo por el reblandecimiento de los cerros que por décadas las han sostenido en inclinadas pendientes, donde al menos siete rancherías son consideradas de alto riesgo.

Las miradas de zozobra y miedo recorren la comunidad mientras los ríos reclaman su cauce sobre las calles empedradas de Santa María, donde más de 60 días de constantes lluvias han cuarteado los cerros, donde las capas de lodo en algunas secciones cubren a los habitantes hasta las rodillas.

“Afectados: 8,000; necesitamos: víveres, ropa, techos de lámina, apoyo para reconstrucción de caminos (…)”, es parte del reporte que se alcanza a leer sobre un pliego de papel revolución, pegado en uno de los muros del Palacio Municipal.

En tanto, en la explanada municipal se alcanza a observar una cuarteadura que amenaza la existencia del inmueble, cuarteadura que casi pasa desapercibida para los cientos de militares, pobladores y elementos de ayuda y rescate que han arribado a la zona.

Aunque los esfuerzos por comunicarse con los habitantes de la veintena de rancherías que conforman a Tlahuiltoltepec ha sido constante, lo cierto es que los derrumbes han impedido conocer el estado en que se encuentran, afirma una autoridad municipal.

Mientras tanto, la ayuda que ayer era constante, hoy ha bajado su ritmo, mientras tanto el agua continúa el reblandecimiento de las montañas mixes.

“Sólo los mixes pueden vivir aquí”, fue la expresión de uno de tantos extraños que arribaron a la zona tras sortear kilómetros de piedras y lodo; sólo los mixes, “los jamás conquistados” como ellos mismos se presumen al haberse defendido con uñas y dientes de la ocupación española.

Gracias a ello esta raza indígena pura, como ellos se presumen, se mantiene en pie a pesar de la fuerza de la naturaleza que hoy reclama su territorio, a pesar de la disminución de la ayuda, a pesar de la decepción de muchos tras la alerta fallida.