El alumbramiento del felino, que peso un kilogramo, fue el primero en su tipo en este parque, mientras que el de los cinco lobos canadienses, especie que se encuentra extinta en estado libre, es el segundo que se logra en El Ocotal en perfectas condiciones, logrando que los cachorros pesaran 600 gramos en promedio, y se trabaja en su alimentación brindándoles croquetas y leche especial para su edad.
Estas especies, catalogadas como vulnerables, lo que significa que de no reproducirse en cautiverio, podrían estar en peligro de extinción, pudieron nacer con los programas para la conservación y reproducción de especies en peligro de extinción o en riesgo, que el gobierno del Estado de México, a través de la Secretaría del Medio Ambiente, ha impulsado en estos sitios de conservación de fauna.
Cabe destacar que para que el nacimiento de estos animales fue asistido por personal del área médica de Zacango, quienes brindaron los cuidados correspondientes para garantizar el sano desarrollo de estos cachorros, y una vez que comiencen a crecer, serán trasladados a otros zoológicos para abrir nuevas líneas sanguíneas y complementar parejas, con el objetivo de preservar ambas especies.