El especialista, quien es coordinador del Módulo de Anatomía Patológica del XVIII Congreso Internacional Avances en Medicina (CIAM 2016), que tendrá lugar del 25 al 27 de febrero en Expo Guadalajara, explicó que estas autopsias disminuyeron porque hoy las familias de muchos pacientes no las autorizan.
Dijo que las autopsias clínicas hospitalarias solamente se realizan con la aceptación, autorización o consentimiento informado de parte de los familiares, a diferencia de las médico-forenses o legales que tienen otra finalidad.
“Dependemos de que los familiares nos autoricen para hacer una revisión macroscópica y microscópica del cadáver”, señaló.
Subrayó que las autopsias clínicas son importantes porque permiten a los médicos comprender el comportamiento de las enfermedades infecciosas y tomar las medidas pertinentes cuando el paciente está vivo y tiene determinada enfermedad.
Añadió que los familiares del paciente afectado y quienes convivieron con él pueden resultar beneficiados a raíz de la autopsia clínica hospitalaria para prevenir, por ejemplo, los estragos de la tuberculosis que puede afectar pulmones, riñones, tubo digestivo, cavidad abdominal y sistema nervioso central.
Franco Topete detalló que en los años 50 las enfermedades infecciosas como las respiratorias y del tubo digestivo estaban en los primeros lugares como causas de muerte.
“Hoy esta situación se ha modificado en México y Jalisco. Por ejemplo, las de vías respiratorias como neumonía se encuentran en el noveno lugar y las intestinales están en el lugar 16, tomando en cuenta la mortalidad general”, apuntó.
El Módulo de Anatomía Patológica del congreso busca identificar, reafirmar y actualizar las medidas que debe tomar el médico patólogo en el análisis de órganos y tejidos, así como mejorar la interrelación clínica para obtener resultados precisos, certeros y claros para un mejor manejo de los pacientes con enfermedades infecciosas.