Señaló en un comunicado que se debe aplique la ley de manera indistinta y directa y evitar que una situación como la que hasta el momento se vive en ese estado se pueda replicar en otras entidades en donde hay problemas de seguridad, con el magisterio o con la existencia de guardias de autodefensa.
“La situación que se vive en Michoacán, mi estado natal, es verdaderamente preocupante”, indicó González Morfín.
Dijo que “llegar a hablar incluso de la posible desaparición de Poderes (en Michoacán) es muestra de la incapacidad de las autoridades locales de conservar el orden público, de hacer respetar la ley y de ejercer la autoridad que ha pasado, en algunas regiones, a manos de organizaciones de toda índole”.
Sostuvo que más allá de pensar en una desaparición de poderes en el estado, se tienen que agotar todos los mecanismos posibles para que se restaure el orden social, la representación de la autoridad y la seguridad para los michoacanos.
Sobre todo, agregó, lo que necesita Michoacán es un acompañamiento del gobierno federal en todos los aspectos, a fin de que esta situación no se agudice.
“Con un estricto respeto a la soberanía que cada estado merece y a las funciones de los integrantes de cada Poder, el gobierno federal tiene la obligación de no dejar solo a Michoacán; tiene la obligación de dotar de todo el apoyo, logístico, material o con personal mediante una coordinación adecuada, para ir desactivando cada uno de los problemas que enfrenta”, señaló.
Consideró que el escenario que se aprecia obliga a una visión multidisciplinaria por parte de la autoridad federal, pues no sólo es un tema de seguridad, también hay problemas con los estudiantes normalistas, con la toma de alcaldías, con la presencia de grupos de autodefensa y con los temas de seguridad que siguen pendientes.
“Se requiere el mayor respaldo posible de parte de la gobierno federal para comenzar a encontrar soluciones”, expresó.
El legislador federal dijo que durante los últimos días se han configurado decenas de delitos que van desde secuestro, robo, saqueo, ataque a las vías de comunicación, entre otros, que siguen impunes y la sociedad michoacana no se merece un entorno de intranquilidad e inseguridad.
“Francamente espero que la llegada del general Alberto Reyes Vaca sea el inicio de un plan de trabajo, coordinado con la autoridad federal, para recuperar la estabilidad y tranquilidad en Michoacán”, indicó.
Insistió en que el diálogo es el mejor de los mecanismos para encontrar coincidencias y soluciones, pero no sustituye la aplicación de la ley.
“Los delitos no se conmutan por diálogo; si existen delitos, que se sancionen”, consideró.
Expuso que las circunstancias que vive Michoacán no son resultado de unos meses, sino de años y de administraciones que no han sido eficientes.
Por esa razón, consideró que las soluciones pasa por generar desarrollo interno, cuidar las inversiones, nacionales y foráneas asentadas en el estado, generar mejor educación, restaurar los valores y reconstruir el tejido social para atender a los jóvenes y generar opciones de empleo, entre otras cosas.
“La crisis que vive Michoacán se tiene que detener, no podemos permitir que entre en una espiral sin fin. Urge comenzar ya. Creo que la llegada de un nuevo titular de Seguridad puede ser un buen comienzo, pero este esfuerzo puede verse diluído si el gobierno federal deja solas a las autoridades de la entidad”, indicó.