La entidad con sede en San Francisco tuvo una facturación acumulada entre enero y septiembre de 54,415 millones, un 17 % menos interanual.
En el tercer trimestre, el más seguido por los analistas de Wall Street, Wells Fargo logró un beneficio neto de 2,035 millones, lo que supone un 56 % menos en comparación con ese tramo de 2019
Los ingresos entre julio y septiembre ascendieron a 18,862 millones, un 14 % menos interanual.
El margen de intereses fue de 9,368 millones, un 19 % menos.
"Aunque nuestro margen de intereses cayó en el tercer trimestre, principalmente debido al entorno de bajos tipos de interés, hemos visto incrementos en otras categorías de ingresos, incluyendo unos robustos resultados en las hipotecas bancarias", indicó citado en una nota el jefe financiero del ente, John Shrewsberry.
La compañía se anotó una provisión para pérdidas crediticias de 769 millones y cuenta con un total de 20,500 millones, que refleja "la continua incertidumbre a causa de la pandemia de COVID-19".
También registró un cargo de 718 millones relacionado con indemnizaciones de despido y unas "pérdidas operativas de 1,200 millones, principalmente atribuidas a devengos de compensación a clientes", desgranó Shrewsberry.
Los resultados trimestrales "reflejan el impacto de la agresiva política monetaria y el estímulo fiscal en la economía estadounidense", dijo el consejero delegado, Charlie Scharf.
"Las comisiones bancarias por hipotecas, los mercados de acciones al alza y la bajada secuencial de las cuentas incobrables ha impactado positivamente nuestros resultados, mientras que los tipos de interés históricamente bajos redujeron nuestro margen de intereses y nuestros gastos siguieron siendo elevados", agregó Scharf.
Para Wells Fargo, la trayectoria de la recuperación económica "no está clara" porque continúa el impacto del coronavirus, que amenaza ahora con una segunda ola en el país, y hay incertidumbre sobre un nuevo estímulo fiscal, por lo que se mantiene con "los niveles de capital y liquidez por encima de los mínimos regulatorios".
Los resultados no superaron las expectativas de los analistas de Wall Street y después de la apertura de la sesión, sus acciones descendían casi un 4 %.
Desde que comenzó el año, Wells Fargo ha perdido casi un 56 % de su valor en bolsa.