La jueza Amy Coney Barrett denegó una solicitud de emergencia de la fundación Pacific Legal, con sede en California, para que el alto tribunal bloqueara la política impulsada por la Casa Blanca para cancelar hasta 10,000 dólares de deuda por estudiante.
Sin embargo, el plan sigue suspendido de manera temporal por orden de un tribunal de menor instancia a raíz de una denuncia liderada por seis estados gobernados por los republicanos.
Unas 26 millones de personas en todo el país solicitaron ya la cancelación de su deuda desde que se anunció el programa, a finales de agosto, de acuerdo con la Casa Blanca, que ha animado a quienes cumplan los requisitos a seguir inscribiéndose al programa.
El Gobierno Biden ha defendido su plan ya que "los gastos mensuales de decenas de millones de estadounidenses aumentarán de manera radical si los pagos de las deudas se reanudan el próximo año".
A mediados de octubre, la Corte de Apelaciones del Octavo Circuito de EE.UU. bloqueó con carácter temporal la condonación de la deuda, hasta que el juez emita un fallo sobre el caso.
La apelación fue presentada por seis estados (Arkansas, Iowa, Kansas, Misuri, Nebraska y Carolina del Sur) después de que el jueves el magistrado Henry Autrey de la Corte del Distrito Este de Misuri emitiese otra orden en la que consideraba que los demandantes no son parte perjudicada por la condonación de la deuda y por tanto rechazase su petición de bloqueo.
Los estados habían demandado al Gobierno y habían pedido que se bloqueara la condonación al considerar que Biden se había extralimitado con esta decisión y que carecía de competencias para decretar algo así de forma unilateral.
A finales de agosto, Biden anunció que perdonará parte de la deuda que millones de universitarios contrajeron con el Gobierno federal para poder pagar sus estudios, en un guiño al voto joven antes de las elecciones legislativas del 8 de noviembre.
El mandatario informó de la cancelación de hasta 10,000 dólares de deuda por estudiante, pero esa medida solo beneficiará a quienes ganan menos de 125,000 dólares al año o a quienes, estando casados, suman ingresos por debajo de los 250,000 dólares anuales.