El informe de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) sobre Polonia fue presentado en Varsovia por el secretario general de la organización, Ángel Gurría, y el viceprimer ministro polaco, Waldemar Pawlak.
Gurría destacó que "Polonia ha sido un actor importante" durante la crisis económica, con pasos decididos para reducir más rápido que otros países la brecha de ingresos con sus socios de la Unión Europea.
"Con la economía europea en desaceleración, Polonia debe tomar nuevas medidas para reducir su déficit público y aplicar reformas clave" en su economía, dice el último estudio económico de la OCDE sobre el país centroeuropeo.
"Ahora es el momento para que las autoridades polacas promuevan reformas innovadoras y apuesten por el crecimiento verde, así como de implementar reformas estructurales y sociales que permitan al país continuar su acoplamiento con el resto de Europa y, a la vez, consolidar la confianza de los mercados financieros en el futuro económico de Polonia", dijo Gurría durante la presentación.
Para la OCDE la política polaca debe buscar hoy una mayor consolidación fiscal, reducir el déficit presupuestario, mantener la deuda pública externa bajo control y mejorar la credibilidad fiscal, lo que servirá para aliviar los riesgos de contagio.
El gobierno polaco prevé situar este año el déficit en torno al 2.9 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), aunque serán necesarias medidas más concretas para alcanzar los objetivos de reducir el déficit al 2 por ciento en 2013 y al 1 por ciento en 2015, añade el documento elaborado por la OCDE.
Estos objetivos exigirán, por ejemplo, la reducción del gasto fiscal, la reforma del sistema de seguridad social para los agricultores o del sistema general de pensiones, algo que cuenta con una fuerte oposición social.
La OCDE prevé que la economía polaca crezca por debajo del 3 por ciento este año y oscile en torno al 2.7 por ciento en 2013, niveles de crecimiento inferiores al 4.3 por ciento registrado en 2011.