El índice de clima de consumo del instituto GfK de Núremberg para noviembre repuntó ligeramente a 8.5 puntos después del dato revisado de 8.4 puntos en octubre.
Los ciudadanos alemanes "se mostraron indiferentes a la tensión continua en la situación geopolítica y al consecuente enfriamiento de la coyuntura", comentó el instituto.
Las expectativas de los consumidores volvieron a estabilizarse después de dos fuertes caídas, mientras que la previsión de ingresos y la disposición a comprar marcaron incluso subidas.
"La situación estable del empleo reduce el miedo a la pérdida de trabajo y aumenta así la posibilidad de planificar con seguridad, importante sobre todo para el nivel de compra", analizó el GfK.
La disposición al consumo también se vio favorecida por el buen nivel de ingresos de los hogares y por las bajas tasas de interés, que desalientan el ahorro y fomentan el gasto.
El dato positivo se conoce diez días después de que el gobierno alemán rebajara fuertemente su previsión de crecimiento para este año (del 1.8 al 1.2 por ciento) y para 2015 (del 2.0 al 1.3) debido a un enfriamiento de la coyuntura por la inestabilidad global. (DPA)