Las compras, que ya había anticipado el pasado martes el presidente de la Fed, Jerome Powell, durante un discurso en Denver, Colorado, comenzarán el martes próximo.
La amplitud de las reservas "garantiza que el control sobre el nivel de la tasa de fondos federales y otros tipos de interés a corto plazo se ejerza primordialmente mediante el establecimiento de las tasas administradas por la Reserva Federal", indicó un comunicado de la institución.
En su disertación, Powell había enfatizado que el crecimiento de la hoja de balance "para propósitos de gestión de las reservas no debe confundirse, de manera alguna, con los programas de compra a gran escala de activos que pusimos en práctica después de la crisis financiera".
De cara a la crisis financiera de 2008, la Reserva volcó torrentes de dinero en el sistema financiero y su portafolio de activos saltó de 1 billón de dólares en 2007 a 4.5 billones de dólares en 2015.
A medida que la situación económica ha ido mejorando, la Reserva ha reducido gradualmente sus activos a poco menos de 4 billones de dólares, pero eso ha reducido el nivel de reservas disponibles para los bancos.
Las adquisiciones anunciadas hoy procuran evitar que se repitan las tensiones de liquidez que en las últimas fechas han experimentado los mercados de capital, que reflejan que los bancos ahora son más renuentes a prestar sus reservas.
El Comité de Mercado Abierto del banco central, que dirige la política monetaria de EEUU, indicó que la Fed comprará bonos del Tesoro "al menos hasta el segundo trimestre del año próximo a fin de mantener amplios balances de reserva en el nivel, o por encima del nivel, que prevalecía a comienzos de septiembre de 2019".
Adicionalmente la Fed llevará a cabo operaciones de recompra (repos) a plazo fijo y a un día bajo al menos hasta enero del año próximo "para asegurar que el suministro de reservas permanezca amplio aún durante períodos de incrementos agudos en las responsabilidades ajenas a la reserva".
La Reserva Federal ha estado adquiriendo hasta 20,000 millones de dólares mensuales en una gama de títulos del Tesoro desde agosto para reemplazar los títulos hipotecarios que han madurado. Las compras por 60,000 millones de dólares anunciadas se suman a las adquisiciones en marcha.
También el banco de la Reserva Federal de Nueva YorK inyectó este miércoles 30,800 millones de dólares al sistema financiero, a través de los acuerdos de recompra para aliviar las presiones de financiación en los mercados de capital.
Las reservas bajaron a menos de 1.4 billones de dólares el mes pasado, comparado con 2.8 billones en 2014, cuando la Reserva suspendió su compra de activos.
El comunicado añadió que estas operaciones también "mitigarán el riesgo de presiones del mercado momentario que puedan afectar de manera adversa la ejecución de la política monetaria".