De acuerdo con ese organismo, contribuyeron a la caída en el índice de la inflación factores como las tarifas más bajas del transporte aéreo, los descuentos de ropa en el sector minorista y una reducción en el coste de las actividades de ocio y cultura.
Pese a esa reducción, el índice de la inflación continúa, no obstante, siendo superior al objetivo fijado por el Banco de Inglaterra del 2 por ciento.
La ONS también informó hoy de que el índice de precios minorista (RPI), que incluye el pago de intereses hipotecarios y suele utilizarse como referencia para los salarios, también disminuyó hasta el 3.1 por ciento, frente al 3.3 por ciento registrado en junio.
El RPI se emplea también para calcular cualquier cambio introducido en los precios de los billetes de tren y las subidas en las tarifas reguladas, es decir, aquellas que controla el gobierno.
De esta manera, y a la vista del último dato, el próximo enero se hará efectivo el incremento en el costo de los billetes de tren, cuyo aumento será de un 4.3 por ciento.
Según dijo el analista Philip Shaw a la BBC, "tanto el índice de la inflación como el RPI se acercan mucho a las expectativas de los mercados".
Shaw consideró que "existe una probabilidad razonable de que la inflación se situará en el 2 por ciento hacia la primavera del próximo año".