La compañía resaltó en un comunicado las dificultades enfrentadas en el mercado brasileño por la "grave situación" de la crisis sanitaria, con una media de 2,500 muertos diarios, y la crisis económica local provocada por la covid-19.
"Este contexto dificulta la creación de valor y ha llevado a la compañía a detener su operación en Brasil", donde está presente desde 2016, agrega la nota.
Pese a su salida de Brasil, la empresa informó que "continuará atenta a futuras necesidades y oportunidades de movilidad en este mercado".
Cabify señaló que, a nivel global, la demanda de viajes de la empresa se ha recuperado en un 75 % a finales de 2020, mientras que en algunos mercados se ya ha reactivado el 100 % de la demanda durante los primeros meses de 2021.
La compañía, presente en Latinoamérica y España, tiene 33 millones de usuarios registrados, 400,000 conductores colaboradores y 65,000 empresas como clientes registrados en su división de movilidad corporativa.