El Ejecutivo comunitario "toma nota" del recurso presentado por el Reino Unido, dijo hoy la portavoz comunitaria de Fiscalidad, Emer Traynor, quien añadió que la CE "aún no ha sido informada de su contenido específico" y eludió hacer una valoración más concreta.
La creación de una tasa sobre las transacciones financieras fue aprobada el pasado 22 de enero por once Estados miembros mediante el procedimiento de "cooperación reforzada", y también ha recibido "luz verde" del Parlamento Europeo, recordó la portavoz comunitaria al ser preguntada sobre el tema en rueda de prensa.
La Comisión "se basó en un cuidadoso análisis para garantizar que se respetaba la base legal" a la hora de proponer dicho procedimiento, y por tanto tiene "plena confianza en que se trata de una medida con solidez jurídica", subrayó Traynor.
El ministro británico de Economía, George Osborne, anunció el pasado viernes que su país había presentado "una demanda legal" contra la propuesta de la CE para la creación una tasa sobre transacciones financieras mediante el procedimiento de cooperación reforzada.
"No estamos contra los impuestos a las transacciones financieras en principio, pero nos preocupan los aspectos extraterritoriales de la propuesta de la Comisión", dijo Osborne, quien señaló que esas preocupaciones "son compartidas por otros países".
Aunque las negociaciones aún no han concluido, Reino Unido considera que no se han establecido de momento suficientes garantías de que el impuesto no afectará a los territorios de la Unión Europea que lo rechazan.
La Comisión "esperará a que haya una decisión del Tribunal", y mientras tanto los once Estados miembros "seguirán trabajando entre ellos" con vistas "a adoptar la cooperación reforzada e implementar la tasa", añadió la portavoz comunitaria.
Los países que el pasado enero se comprometieron a aplicar el impuesto, destinado a frenar la especulación y a que la banca asuma parte del coste de la crisis fueron Francia, Alemania, Bélgica, Portugal, Eslovenia, Austria, Grecia, Italia, España, Eslovaquia y
Traynor recordó que no es la primera vez en que se recurre un procedimiento de cooperación reforzada ante la Corte de Luxemburgo, puesto que Italia y España ya lo hicieron anteriormente contra su utilización para sacar adelante la patente comunitaria, un recurso que fue desestimado por el tribunal europeo.