"La economía alemana sufre actualmente bastante bajo la debilidad de la demanda desde la zona del euro y el resto del mundo", señala en el informe el jefe de estudios coyunturales del DIW, Ferdinand Fichtner,
Tras recordar que en el trimestre anterior la economía alemana solo creció un 0.2 por ciento, tras un 0.3 por ciento en el segundo y un 0.5 por ciento en el primero, Fichtner señaló que en el cuarto no habrá prácticamente crecimiento del PIB.
La bajada de la demanda ha conducido además a que "las empresas en Alemania se reserven a la hora de hacer inversiones, lo que grava suplementariamente la economía.
Por todo ello, el DIW considera que en los próximos meses se producirá un ligero incremento del desempleo y un retroceso de la creación de puestos de trabajo.
Sin embargo subrayó que actualmente el debilitamiento de la demanda no está llevando a las empresas a reducir plantilla, sino a recortar horarios laborales.
Finalmente destacó que la todavía buena situación del mercado laboral y las apreciables subidas salariales que se están registrando contribuirán, pese a todo, a sostener la coyuntura.