A las 09:05 hora local (13:05 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en octubre sumaban 0.08 dólares respecto al cierre de la sesión previa del martes.
El precio del barril de referencia en Estados Unidos continuaba al alza tras conocerse que las reservas del país bajaron en 6.4 millones de barriles en la última semana, según cifras del Instituto Americano del Petróleo, un descenso mayor del esperado por los analistas, que preveían en torno a dos millones.
También apoyaba la subida de los precios la aceleración de la actividad industrial registrada en EE.UU. y en China durante agosto, lo que hace pensar a los inversores en que lo peor de la pandemia puede haber pasado.
En Estados Unidos, según datos publicados el martes, la actividad productiva se elevó en agosto hasta niveles no vistos en año y medio gracias a una avalancha de pedidos, de acuerdo al índice de manufactura ISM, aunque la tasa de desempleo sigue sugiriendo que la de Estados Unidos es una recuperación lenta.
Mientras, según el índice Caixin/Markit PMI, el sector manufacturero chino mostró el mes pasado su mayor ritmo de expansión en casi una década, gracias a un incremento de sus exportaciones tras el parón de meses anteriores.
El crudo estadounidense se ha visto beneficiado recientemente por la debilidad del dólar frente a otras divisas como el euro, lo que suele presionar al alza el precio del petróleo de Texas, al hacerlo más barato en otras monedas.