Tras un tercer trimestre en el que el fin de los confinamientos produjo un incremento del 12.7 % en el producto interior bruto (PIB) del área del euro, según Eurostat, la llegada del otoño y el aumento de contagios y restricciones para afrontar la segunda ola amenazan con llevar el PIB de nuevo a terreno negativo.
En ese contexto, los ministros debatirán sobre la situación de la economía y, dada la interacción entre la crisis sanitaria y económica, la directora del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, Andrea Ammon, informará en la reunión virtual sobre la evolución de la pandemia.
Fuentes comunitarias reconocieron que el endurecimiento de las medidas "obviamente tendrá importantes consecuencias en las actividades económicas" y agregaron que es "comprensible" que el Eurogrupo quiera seguir la situación de cerca.
Añadieron que con la aplicación de nuevas restricciones "casi a diario" se ha producido una transformación "muy rápida" en el tono del debate sobre las perspectivas económicas.
Sobre la posibilidad de que los ministros debatan nuevas medidas para la recuperación a nivel de la UE, las fuentes afirmaron que "no hay nada sobre la mesa".
En cualquier caso, indicaron que el paquete de medidas adoptado en abril que cuenta con 540.000 millones de euros en préstamos para países, empresas y trabajadores "están ahí" y apenas han empezado a operar.
Estos créditos se canalizarán a través del nuevo fondo SURE (que en España se usará para financiar los ERTE y otras medidas), el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE).
En cuanto al fondo de recuperación de 750,000 millones de euros (390,000 millones en transferencias directas y 360,000 millones en créditos), recordaron que no se ha desembolsado "ni un céntimo", pues todavía deben lograr un acuerdo final los Estados miembros y Eurocámara.
"El entendimiento general es que es demasiado pronto para incluso implicarse en una discusión cuando las medidas existentes están en una fase tan temprana de uso", comentaron.
Desde el ministerio de Economía español, también dijeron no esperar del encuentro "conclusiones concretas de medidas que se vayan a adoptar a corto plazo", pero sí "la voluntad de los países de hacer un seguimiento estrecho de este cuarto trimestre y, en función de la evolución, la posibilidad de tomar medidas adicionales, siempre que estuviera justificado".
"El mensaje es que hay que estar dispuesto para tomar medidas adicionales si es necesario", reiteraron, pero destacaron que "hay que ver, primero, cómo conseguimos aplicar las que tenemos en marcha de la forma más acelerada".
El debate de los ministros tendrá lugar dos días antes de que el 5 de noviembre la Comisión Europea publique sus nuevas previsiones macroeconómicas.
Por otro lado, los titulares económicos de la eurozona debatirán por primera vez sobre la posibilidad de introducir un euro digital, a raíz de la publicación de un informe del Banco Central Europeo, que explorará en los próximos meses las opciones para ello.
Ya a Veintisiete, los ministros repasarán la implementación hecha hasta ahora del paquete de 540,000 millones de euros en préstamos.