En la presentación del “Panorama Social de América Latina 2016” de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Bárcena añadió que “el uno por ciento de las familias mexicanas acaparan más de un tercio de la riqueza”.
Producto de esta realidad, comentó, “el Coeficiente de Gini de los activos totales (físicos y financieros) de las familias es de 0,79. Es decir, la repartición es mucho más desigual en activos financieros, donde el 80 por ciento de la riqueza es propiedad del 10 por ciento más rico”.
“México puede que en desigualdad de ingreso presente un Gini superior a 0,45, pero cuando nos vamos a la riqueza estamos en 0,79, lo que nos parece muy relevante”, acotó la funcionaria al indicar que “este patrón lo tendremos que analizar para el resto de los países de la región”.
Explicó que “lo que hemos hecho con este primer estudio es tener los datos, es una primera aproximación en busca de las evidencias, para después pasar a las políticas, un tema de mucho fondo que implica una discusión y un debate”.
Esa discusión, comentó, se vincula a determinar “hasta donde pueden ayudar a la redistribución las políticas fiscales, qué tipo de políticas fiscales podrían apoyar. Se ha hablado de un impuesto al patrimonio, un impuesto a la riqueza, al capital, ese tipo de aspectos hay que explorar”.
Según el documento presentado este martes, “entre 2003 y 2014 la economía mexicana creció a un promedio anual del 2.6 por ciento. No obstante, la riqueza alcanzó un crecimiento real promedio anual del 7.9 por ciento en el mismo período. Esto significa que la riqueza en México se duplicó entre 2004 y 2014”.
El estudio dio cuenta de una “fuerte concentración en la propiedad de los activos físicos” en México, con un “alto grado de heterogeneidad estructural” donde un 10 por ciento de las empresas concentran el 93 por ciento de los activos físicos.
La funcionaria de Naciones Unidas indicó que la estructura de la propiedad de los activos es una de las variables “fundamentales” en la reproducción y profundización de la desigualdad social.
“La desigualdad más alta, más profunda y más estable se da en la desigualdad en la riqueza y no tanto del ingreso. En la riqueza vemos que hay un problema estructural”, planteó.
Bárcena precisó que determinar la realidad de cada país en materia de desigualdad “crea conciencia. Para generar un nuevo pacto social se requiere que la sociedad tome conciencia de la urgencia y necesidad de tener una mejor distribución funcional entre el reparto a la masa salarial y al capital”.
“Hasta ahora, nuestros países han privilegiado más el reparto hacia el capital, de las ganancias, que a la masa salarial. Entonces, uno de los temas es proteger el empleo, los salarios mínimos, que el factor trabajo tenga un mayor peso en la ecuación económica”, dijo.
Recalcó que “tienen que haber políticas que cautelen más el empleo, que le den más importancia al factor trabajo que al factor riqueza para ir logrando esta nivelación”.
Puntualizó que “en este momento no tenemos una batería de propuestas, todavía, porque necesitamos lograr más información para tener claro si hay patrones que se están reproduciendo, incluso si hay países que ya han resuelto esta situación”.
Advirtió que un tema que preocupa es que en México “hay una alta proporción de mujeres que no participan en el mercado laboral formal, muchas mujeres que trabajan por cuenta propia, en micro-empresas, que no están dentro de los sistemas de protección social”.
Planteó que a las reformas estructurales realizadas por el gobierno mexicano “deben estar acompañadas de otro tipo de reformas sociales, de mayor alcance, como la universalización de los servicios sociales e inclusive lo que se planteó en la Ciudad de México respecto al ingreso básico ciudadano”.
Bárcena subrayó que la desigualdad “es un desafío estructural que conspira contra el desarrollo sostenible y es central para la Agenda 2030 en la región”, tras lo cual enfatizó que “la desigualdad no es inevitable, la desigualdad puede atacarse con políticas activas”.
Citó a la empresa de servicios financieros Credit Suisse para indicar que 0.7 por ciento de los adultos del mundo (unas 35 millones de personas) concentran un 45 por ciento de los activos físicos y financieros del planeta.
Por otra parte, 123 mil personas consideradas “ultra ricas” acaparan un nueve por ciento de la riqueza mundial.
Respecto a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la titular de la Cepal dijo que un eventual alza del salario mínimo mexicano a 92 pesos, lo que implica un incremento del 15 por ciento, “es esencial para la futura negociación”.
“Bajos salarios ya no puede ser la estrategia de competitividad de México”, tras lo cual puntualizó que “México debe presentarse a esta renegociación del TLCAN con una estrategia donde no sean los salarios bajos un motivo de competitividad”.