En su Balance Preliminar de la economía regional 2012, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) destaca que, no obstante, se mantuvo este año la expansión del empleo y de los salarios, mientras la inflación se mantuvo estable, en torno al 5.5 por ciento, dentro de los objetivos del Banco Central.
En ese contexto, el organismo de Naciones Unidas proyecta para el 2013 una fuerte recuperación, con un crecimiento del PIB en torno al 4.0 por ciento, principalmente por una recuperación de la industria, la continuidad del consumo interno y un aumento de las exportaciones.
Ello, gracias a la mayor competitividad lograda con las medidas de estímulo al crecimiento por la depreciación cambiaria aplicadas por las autoridades.
La Cepal destacó que en 2012 el PIB por habitante creció en Brasil un 0.4 por ciento, mientras los salarios medios reales lo hicieron un 3.6 por ciento y la tasa de desempleo urbano bajó desde un 6.0 por ciento en 2011 a un 5.5 este año.
Aunque la balanza comercial cerrará con déficit de unos 21,000 millones de dólares debido al descenso de las exportaciones, la balanza de pagos lo hará con un saldo positivo de 22,364 millones de dólares, como resultado de un déficit de 54,087 millones en la cuenta corriente y un saldo positivo de 76,451 millones de dólares en la cuenta de capital.
El informe destaca que este año el consumo siguió siendo el factor más dinámico de la economía brasileña, debido a las buenas condiciones del mercado laboral y la continuidad del crecimiento del crédito, que se combinó con tasas de interés más reducidas.
La inversión tuvo un comportamiento menos favorable, con un crecimiento atenuado del gasto en inversión pública y una débil demanda de nuevos préstamos al Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
En el lado contrario de la balanza, la Cepal señala que el menor crecimiento del producto estuvo relacionado principalmente con la evolución de la producción industrial, que cayó un 2.9 por ciento en tasa interanual entre enero y octubre.