La adhesión de Venezuela al Mercosur ya ha sido aprobada por los parlamentos de Argentina, Brasil y Uruguay y su concreción depende sólo del respaldo del Congreso paraguayo, en el que la oposición y algunos sectores del oficialismo tienen bloqueado el trámite desde hace unos tres años.
Según admitió García en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros, eso ha generado "cierto malestar" en el Mercosur, pues "hasta el Gobierno paraguayo" apoya el ingreso de Venezuela.
García dijo que Brasil no tiene hasta ahora información precisa sobre la propuesta del presidente uruguayo, José Mujica, quien ha planteado la posibilidad de procurar variantes jurídicas para acoger a Venezuela en el bloque sin la necesaria ratificación del Congreso paraguayo.
Tampoco precisó si Brasil apoyaría esa alternativa, que pudiera ser abordada durante la Cumbre que el bloque celebrada en Montevideo el próximo día 20, pero consideró que, "respetando la soberanía del Congreso paraguayo", el asunto debe resolverse con la mayor brevedad posible.
El Tratado de Adhesión de Venezuela al Mercosur fue aprobado por los gobiernos de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay en julio de 2006 durante una reunión celebrada en Caracas, a la que asistieron los jefes de Estado de los cinco países y el presidente de Bolivia, Evo Morales, como invitado especial.
Los Parlamentos de Argentina y Uruguay fueron los primeros en ratificarlo, mientras que en Brasil el trámite demoró más de dos años y estuvo salpicado de polémicas sobre el supuesto talante "autoritario" del presidente Hugo Chávez y una alegada "falta de garantías democráticas" en la Revolución Bolivariana.
El "malestar" de Brasil en relación al Parlamento paraguayo incluso va más allá, pues según dijo García, allí se mantiene bloqueada la designación de un nuevo embajador en Brasilia, un trámite que "hace unos dos años" que debería haberse completado.
"Eso no se corresponde con las buenas relaciones" que existen entre Brasil y Paraguay, apuntó el asesor.