Simone Biles se exhibió nuevamente y, junto a Shilese Jones y Leanne Wong, condujo a su equipo hacia un séptimo oro seguido que ningún equipo antes había logrado hasta ahora y que se une a los obtenidos en 2011, 2014, 2015, 2018, 2019 y 2022.
Las estadounidenses estaban hasta ahora empatadas a seis oros consecutivos con el equipo chino masculino (2003, 2006, 2007, 2010, 2011 y 2014). En mujeres, la segunda mejor racha son los cinco oros de Rumanía entre 1994 y 2001.
Biles ha contribuido ya en cinco de esos siete títulos en fila, los de 2014, 2015, 2018, 2019 y 2023. La estrella estadounidense se ha colgado, además, su medalla mundial número 26 resumidas en 20 de oro, 3 de plata y 3 de bronce. Este miércoles firmó un 14,800 en salto, un 14,466 en asimétricas, un 14,300 en barra de equilibrios y un espectacular 15,166 en el suelo para rubricar la séptima corona.
En la final, las estadounidenses lideraron la tabla con 167,729 puntos y acabó por delante del equipo de Brasil, integrado por Rebeca Andrade, Jade Barbosa y Flavia Saraiva y medalista de plata a 2,199 para firmar la primera medalla por equipos de su historia. La rozó en 2022.
El podio, a 3,665 puntos de las norteamericanas, lo completó contra pronóstico el equipo de Francia, integrado por Marine Boyer, Melanie Dos Santos y Coline Devillard.
Tras ser tercero en las clasificatorias y liderar la final después de la primera rotación, China tuvo que conformarse con la cuarta plaza a 4,567 de las campeonas.
También se quedó fuera del podio el de Gran Bretaña, que fue segundo en la ronda clasificatoria con Ondime Achampong, Ruby Evans y Jessica Gadirova y que acabó sexto y superado por Italia. Cerraron la tabla os equipos de Países Bajos y Japón.