Quartararo marcó un mejor tiempo de 1:31.116 en la penúltima de las 40 vueltas que completó al trazado de la "Riviera del Adriático" y en pista se le pudo ver en ocasiones con el prototipo de 2023, en el que destaca un nuevo motor mucho más veloz, nuevo chasis y también nueva aerodinámica.
Marc Márquez fue de los que llegó pronto al circuito y estuvo departiendo un buen rato con su equipo de ingenieros y mecánicos antes de saltar a pista con hasta tres motos diferentes y probando multitud de nuevas piezas y algunas no tanto, pues en uno de los prototipos se pudo apreciar un carenado completamente nuevo, muy similar al de las Aprilia RS-GP de Aleix Espargaró y Maverick Viñales, y un basculante del chasis Kalex de Moto2.
Márquez demostró una constante adaptación a la moto tras el período de recuperación de su cuarta intervención quirúrgica y enseguida se mostró muy rápido, acercándose a los mejores de la categoría y siendo ya el piloto más rápido entre todos los representantes del Ala Dorada.
El piloto de Repsol Honda completó 34 giros al trazado y su mejor registro lo consiguió en el vigésimo noveno, 1:31.642, a 526 milésimas de Quartararo.
Quartararo, con un registro de 1:31.116 rebajó en algo más de una décima de segundo el mejor tiempo del primer día de entrenamientos, que lo estableció el italiano Francesco "Pecco" Bagnaia (Ducati Desmosedici GP22) en 1:31.292 y que hoy rebajó hasta 1:31.172, a escasamente 56 milésimas de segundo del campeón del mundo francés.
Tras ellos, acabó el español Maverick Viñales al manillar de su Aprilia RS-GP, a escasamente 73 milésimas de segundo, mientras que Enea "La Bestia" Bastianini (Ducati Desmosedici GP21) fue cuarto a 171 milésimas de segundo y por delante del otro piloto de Aprilia, Aleix Espargaró.