Osaka defiende el título; Serena es la gran favorita y preferida

La japonesa Naomi Osaka regresa al Abierto de Estados Unidos como la defensora del título, y con el recuerdo de la "osadía" que protagonizó el año pasado al vencer en la pista Arthur Ashe de Flushing Meadows a la "intocable", preferida y gran favorita de los neoyorquinos, la tenista local Serena Williams.

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Un año después de haber logrado la hazaña deportiva de su primer título de Grand Slam y dejar a la menor de las hermanas Williams sin su séptimo título del Abierto y vigésimo cuarto del Grand Slam, Osaka no llega en su mejor momento, tras haber sufrido una lesión en el Premier 5 de Cincinnati, pero es la campeona a batir.

Su primera rival será la joven rusa Anna Blinkova y si avanza hasta los cuartos de final podría enfrentarse con la holandesa Kiki Bertens, que ha entrado en el cuadro como séptima cabeza de serie. De llegar a las semifinales, la rumana Simona Halep, cuarta favorita, sería la rival de la nipona.

Pero Osaka, de 21 años, quien también ganó este año el Abierto de Australia, se libra de enfrentarse contra Serena, la actual número ocho del mundo, que está colocada en la parte baja del cuadro, y de verse de nuevo lo harían también en la gran final.

Antes, la menor de las hermanas Williams, de 37 años, que hace 20, en 1999, ante la suiza Martina Hingis, ganó su primer Grand Slam en Flushing Meadows (6-4, 7-6) para iniciar una carrera legendaria, tendrá que superar, nada más iniciar la competición, este lunes, a la rusa Maria Sharapova, otra exnúmero uno del mundo, y también campeona del Abierto (2006).

Aunque Serena ha dominado los 22 duelos que han mantenido, con una marca de 19-3, Sharapova, de 32 años, que ocupa el puesto 87 en la clasificación de la WTA, puede ser un peligro.

Especialmente, si Serena no está completamente recuperada de las molestias que sufrió en la parte baja de la espalda y que la obligaron a retirarse en medio de la final del Premier 5 de Toronto y tampoco pudo jugar luengo en Cincinnati.

Pero el convencimiento general entre los expertos es que la menor de las hermanas Williams se encuentra lista para recuperar el reinado en Flushing Meadows y alcanzar el gran sueño de la marca histórica de los 24 títulos de Grand Slam, que está en poder de la legendaria Margaret Court.

Nadie duda que Serena, a pesar de llevar ya 25 años en el circuito de la WTA, mantiene un nivel físico superior al resto de las jóvenes que ahora están ya por delante suya en la clasificación mundial.

Serena también posee el poder de imponer su criterio sobre los organizadores del torneo, al lograr que el árbitro portugués Carlos Ramos, con el que protagonizó el año pasado uno de los incidentes más sonados en la historia del torneo, sea vetado durante las dos semanas y no pueda dirigir partido alguno a las dos hermanas Williams.

La presidenta de la Asociación de Tenis de Estados Unidos, Stacey Allaster, anunció que Ramos no arbitraría ningún partido a la familia Williams. "Esta es nuestra decisión colectiva", declaró Allaster. "Queremos centrarnos en la competición", añadió.

El torneo contará con el joven talento que encabeza la australiana Ashleigh Barty, segunda cabeza de serie, campeona este año de Roland Garros, su primer título de Grand Slam, la checa Karolina Pliskova, tercera favorita, y Halep, quien se convirtió en la verdugo de Williams en la final de Wimbledon.

La ucraniana Elina Svitolina, quinta favorita, podría enfrentarse con Pliskova en cuartos de final y la ganadora se convertiría en la potencial rival de Serena en las semifinales.

Otra tenista checa, Petra Kvitova, llega al último torneo del Grand Slam como sexta favorita, y junto con Bertens (7) están por delante de la menor de las Williams en la clasificación mundial, pero que no cuentan como favoritas al título de campeonas en Flushing Meadows.

Como tampoco lo están este año las estadounidenses Sloane Stephens, la ganadora del Abierto en el 2017, undécima favorita.

Por detrás de su compatriota Madison Keys, a la que ganó en la gran final del 2017, pero que este año tiene mejores resultados, como fue proclamarse campeona en Cincinnati, su primer título de un Premier 5, que le permitió entrar de nuevo al 'top 10' de la WTA.

El torneo también tendrá como centro de atención a las jóvenes revelaciones de la temporada, la adolescente estadounidense Cori "Coco" Gauff, quien a sus 15 años, buscará hacer historia en la lucha por el título, lo mismo que la canadiense Bianca Andreescu, de 19 años, decimoquinta cabeza de serie, que fue la verdugo de Serena Williams en el pasado torneo de Toronto.

Gauff ha convertido su participación en polémica por su entrada al torneo, que incumple con la norma establecida por la WTA, pero si hará que sus partidos generen el máximo de interés entre los aficionados neoyorquinos, que siempre buscan disfrutar de nuevas emociones con las jóvenes promesas del tenis mundial.

La española Garbiñe Muguruza, de 25 años, ganadora de dos torneos de Grand Slam, cuya mejor clasificación en el Abierto ha sido alcanzar la cuarta ronda en la edición del 2017, parte como vigésimo cuarta favorita, y tendrá como primera rival a la estadounidense Alison Rise, y si llega a la tercera ronda le podría tocar contra Stephens.