La exhibición de Messi ante el Bayern fue de las que hacen época y pasan a los anales del futbol por la trascendencia del partido, el momento de los goles y la belleza de los dos tantos, especialmente el segundo, que destrozó la cintura de Jérôme Boateng.
La enorme figura del central alemán tendido en el piso tras el fulminante regate del pequeño Messi ilustró la grandeza del crack argentino, que con ese gol superó de nuevo al portugués Cristiano Ronaldo como máximo goleador de la Liga de Campeones.
En su partido número cien en la máxima competición continental, el delantero del Barcelona anotó su tanto 77, uno más de los que acumula el jugador del Real Madrid, que también marcó uno el martes en las semifinales contra la Juventus.
"Messi volvió a mostrar su talento. Ya ha generado muchas situaciones como ésta, aprovecha sus oportunidades", lo elogió Guardiola, aunque luego focalizó sus palabras en todo el equipo.
"No es sólo Leo (Messi), el Barça es muy buen equipo, tienen a Neymar, Luis Suárez; son muy sólidos defensiva y ofensivamente", añadió Guardiola casi una hora después de que su equipo cayera por 3-0 ante el Barcelona.
El técnico del Bayern necesitó un buen rato para digerir los efectos de sus propios augurios.
"Estando como intuyo que está, Messi es imparable", había sentenciado Guardiola en la previa del duelo. "No hay sistema defensivo ni entrenador que pueda pararlo; el talento no se para", había insistido el entrenador español.
Su equipo consiguió contener los efectos del juego del argentino durante tres cuartos de partido. Luego, en un par de minutos, sucumbió.
"Fueron dos buenas acciones en las que nosotros estábamos mal parados, mal posicionados", se limitó a comentar Guardiola sobre los dos goles de su antiguo discípulo.
Luis Enrique, el actual técnico de Messi, en cambio, no se pudo contener.
"Sin ninguna duda, la vida es más fácil (con Messi)", convino el técnico azulgrana a pregunta de una periodista. "Es un placer verlo cada día porque es un jugador de otra dimensión; fijaos también lo que ha corrido en defensa, aunque hoy si no hubiésemos sido un buen equipo, no teníamos nada que hacer contra el Bayern", prosiguió Luis Enrique tras reconocer que el primer gol de la estrella argentina "decantó la balanza" del lado del Barcelona.
"Messi te cambia el partido o te lo decide en cualquier momento. Para nosotros es una garantía de éxito", sentenció el español Andrés Iniesta sobre su compañero.
"Ésa es la diferencia entre un gran jugador y un jugador único. No hay nadie más como él y está en nuestro equipo", añadió el croata Iván Rakitic, admirador confeso del internacional argentino.
No es el único. La hinchada del Camp Nou se llevó las manos a la cabeza tras el segundo gol del argentino, una maravilla que generó incluso un nuevo perfil en Twitter bajo el nombre de @caderadeboateng y la foto del preciso momento en el que el argentino dejaba por el piso al internacional alemán.
Apenas minutos después de que Messi le rompiera la cintura a Boateng y batiera por vez primera en la historia de sus enfrentamientos a Manuel Neuer, el arquero del Bayern, con una fantástica picada de balón, la nueva cuenta ya tenía 800 seguidores.
"Aún no me encuentran", "Ojalá tuviera WhatsApp para enviarles mi ubicación", tuiteó el avispado usuario. Incluso le avisó que tenía un mensaje directo a @JB17Official, la cuenta de Boateng.
"(Guardiola) tenía la razón. Lo conoce bien. Si está inspirado, no hay quien lo pueda parar (a Messi). Lo que ha hecho en el segundo gol es increíble", concluyó Piqué en "Canal Plus", la noche en que el argentino convirtió en pitoniso al entrenador que le encumbró.(DPA)
