La obra de Moscona, híbrida, donde coexisten poemas, testimonios, anécdotas de infancia, conversaciones con la abuela y sueños, dice el presentador Javier Ortega, “nos deja una maravillosa sensación. Los poemas que acompañan esta obra brindan un lenguaje que identificamos. Además, presenta el drama de los judíos, la autora nos comparte su niñez, sus recuerdos, sus recetas, nos transmite sus sensaciones durante su viaje a Bulgaria”.
“Llegué a Bulgaria con un cuadernito de notas para lo que yo pensaba sería un libro de poesía. Entrevisté a muchas personas mayores, pero ya en México, al vaciar la información me doy cuenta que con la poesía, quizá por falta de talento, no podía plasmar todo lo que quería decir, todo eso que venía con tanta fuerza, y vi que era estúpido bloquear lo que quería nacer como una narrativa, y así nació la novela “Tela de sevoya”, y se escribe así, porque así se escribe cebolla en el judeo-español”, explica la también poeta y periodista cultural.
El ladino, lengua de sus antepasados que está por extinguirse, dice Moscona, “tiene giros muy encantadores para mí”. Así los siguientes significados: infancia=chiques; juventud=manceves y así=ancina. “Uno pensará que la gente que habla así lo hace porque no tuvo una educación, pero esa es la lengua que hablaban a finales del siglo 15”.
La autora describe que el ladino o judaíco-español provino de España y se asentó en Bulgaria cuando en 1492, una enorme comunidad de judíos que vivía en la península Ibérica fueron expulsados por los Reyes Católicos, precisamente cuando Colón vino a América.
Para el embajador de Bulgaria en México, Hristo Gudjev, “Misa está con nosotros y ha sido posible que escriba ese libro porque sus padres no abordaron los trenes que estaban para ser deportados a los campos de exterminio, y eso me enorgullece como búlgaro, me enorgullece que Miriam ha escrito este libro con tanto valor en Bulgaria; ella hace mención del holocausto y se debe recordar también que durante los tiempos más oscuros, hubo voluntad y valor cívico; que se puede luchar y lograr cosas”.
Al respecto la escritora responde que en efecto, su madre estaba montada en ese tren que iba a llevar a los judíos a los campos de exterminio, y en el último momento, gracias al heroísmo del pueblo búlgaro y a su demanda, se permitió que esos judíos bajaran del tren.
En un tenor totalmente distinto, cuatro catedráticos investigadores de la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo, sede de la 26 Feria Universitaria del Libro #FUL2013 analizaron esta tarde “El desastre mexicano de 1982-2011, ensayos sobre 30 años de estancamiento económico y social”, donde establecieron entre otras cosas que ni las empresas de la iniciativa privada son lo mejor como tampoco que las del sector público sean lo peor.
Sin embargo, consideraron que contrario al discurso del partido gobernante y los políticos, la reforma energética no es la panacea para impulsar el desarrollo económico del país; en cambio, si lo es acabar con la corrupción para hacer más eficiente a Petróleos Mexicanos, además de una reforma fiscal donde la carga impositiva sea acorde con el nivel de ingresos de los tributantes.
Rodolfo García Galván, Daniel Velázquez Orihuela, Santos Mercado Reyes y Eduardo Rodríguez Juárez dieron sus distintos puntos de vista, donde los dos primeros coincidieron en que con la reforma energética como fue planteada por el gobierno de Enrique Peña Nieto implica que México va a tener que compartir la renta por los ingresos petroleros, mientras en su caso, por las normas del TLCAN a las empresas extranjeras no se les puede exigir un componente de capital nacional como tampoco transferencia tecnológica.
“El gobierno va a perder la posibilidad de generar cadenas de desarrollo porque 40 por ciento de nuestra economía depende de los ingresos de Pemex. Por el contrario, lo que se debe hacer es acabar con la corrupción al interior de la empresa y su sindicato, invertir en desarrollo tecnológico, potencializar al Instituto Mexicano del Petróleo y hacer aquí la refinación del crudo”, expresó Daniel Velázquez.
Por su parte Rodolfo García agregó que así como en 1938 “se cometió la peor salvajada” al quitar las empresas petroleras a los extranjeros, hoy se está a punto de cometer otra”, para después recomendar que “debemos ser vigilantes con el manejo de nuestros recursos”.
Velázquez recomendó que una forma de dinamizar nuestra economía es cobrar impuestos de acuerdo con el nivel de ingresos de los ciudadanos y empresas; financiar a las empresas que invierten en ciencia y tecnología, realizar una selectividad en la inversión extranjera directa como lo realizan muchos países y cobrar un impuesto alto al capital especulativo.
Ambos coincidieron con que no puede ser que Televisa sólo tribute el 10 por ciento de su renta, Carlos Slim nada y el resto de la gente, especialmente la clase media, prácticamente sea ahogada por los impuestos.
Por otro lado, en la presentación de “Valles y alturas”, la primera de una saga de su autoría, la autora coahuilense Adriana Grimaldo aborda la confrontación de valores. Sus noveles tienen que ver con una filosofía de vida y cómo la aplicamos en el mundo, de quienes somos y en qué camino andamos.
“Uno de los ingredientes de mis libros es la filosofía. Yo estudié filosofía. Entonces, hago novelas en las cuales, a través de los diálogos o de las escenas, develo contenido filosófico. Es decir, no te vas a leer nunca las letritas chiquitas de los filósofos, pero vas a entender la filosofía aplicada a situaciones reales y contemporáneas.
En el primer libro, afirma la autora, utiliza la filosofía de Heráclito. Piensa en su frase «nadie se baña dos veces en las aguas del mismo río». Nadie tiene dos veces exactamente la misma oportunidad. “Tenemos siempre miles, pero la misma exactamente sólo una vez. Lo que hago en el primer libro es recrear un no mundo, y ése sería otro de los ingredientes, si habláramos de una receta. Nunca vas a leer en mis libros «sucedió en Saltillo el día tal». Son atemporales, y el lugar me sirve a mí para utilizar la metáfora y hacer alusión a otro mensaje”.
En el caso particular del primer libro, que se llama Valles y alturas, el escenario en el que comienza la historia es un valle, que alude metafóricamente a la infancia de los personajes, y las alturas al punto en el que terminan los jóvenes de la historia. “Ese es otro ingrediente de mis libros: no menciono las edades, las doy a entender. Utilicé doce personajes en un no-mundo porque quiero enganchar al lector. Doce, un abanico de personalidades”.
La actriz María Rebecca participó dentro del programa “Leo, luego existo” al leer “Todo empezó el domingo”, una narración de la escritora Elena Poniatowska y al final de su presentación fue muy enfática para invitar a los jóvenes a aprovechar la gran ventana a la imaginación, la fantasía, pero también el conocimiento, que es la lectura.
El escritor español Ignacio del Valle aprovechó el marco de la #FUL2013 para presentar en América Latina su obra “Caminando sobre las olas”, a la espera de que México sea para él una plataforma importante como lo ha sido para otros escritores de su país.
Y en otra disciplina, Alejandro Muñoz Lomelí, hijo del luchador Blue Demon, compartió con los asistentes, principalmente jóvenes, consejos sobre cómo manejar correctamente la mercadotecnia de una marca, y el ejemplo fue precisamente la marca Blue Demon que hiciera famosa su padre.