El escritor nació en Frankfurt, Alemania, el 28 de agosto de 1749; fue hijo del matrimonio formado entre el abogado y hombre de cultura Johann Caspar Goethe y Catharina Elizabeth Textor, hija de un antiguo alcalde de Frankfurt.
Su padre estaba convencido de que la educación de sus hijos dependía enteramente de él, así que Goethe fue educado en casa hasta que tuvo edad para ir a la universidad, aprendió múltiples idiomas, ciencias, música y deportes.
Bajo las presiones de su padre, Goethe se mudó a Leipzig en 1765 para estudiar Derecho, lo cual no le complacía, se sabe que en aquella época aprovechó sus horas de clase para ir al teatro e investigar trabajos de grandes artistas como Adam Oeser.
Durante esta etapa de su vida se enamoró de la literatura y la pintura, y escribió sus primeras obras “El capricho del enamorado” (1767) y “Los cómplices” (1768), ese mismo año cayó gravemente enfermo y se vio forzado a mantener reposo durante un tiempo.
De acuerdo con el portal "www.goethezeitportal.de", Susanna Katharina Von Klottenberg, amiga de la madre de Goethe cuidó de él durante un año, le enseñó sobre misticismo y religión, en 1769 Goethe se encontró completamente recuperado.
En 1770, Goethe emprendió un viaje a Estrasburgo para seguir estudiando y conoció al filósofo y teólogo Johann Gottfried Herder, con quien entabló una entrañable amistad, aún sin gusto por la abogacía, dirigió su atención a la medicina, la botánica, la alquimia y la química.
En 1771 concluyó sus estudios en Leyes y conoció también a la mujer que lo inspiraró en múltiples ocasiones a crear personajes femeninos, Friederike Brion (1752-1813), para ella escribió algunos de sus poemas como “La canción de Mayo” y “Bienvenida y despedida”.
Poco tiempo después regresó a su natal Frankfurt, donde escribió “Götz Von Berlichingen” (1773), que sirvió como modelo para el movimiento llamado “Sturm und Drang” (Tormenta e impulso), que fue el precursor del romanticismo alemán.
Al año siguiente, Goethe escribió “Las penas del joven Werther” una historia trágica que se convirtió en la obra emblemática del romanticismo, y aunque fue censurada por “justificar el suicidio”, el mismo Napoleón confesó haberla leído.
Durante esta etapa de su vida escribió también “Clavijo” (1774) y “Stella” (1775) que no lograron tener el mismo éxito que el joven Werther, intentó abrir su propio bufete de abogados en Frankfurt y se comprometió con Lili Schönemann.
En 1775, Carlos Augusto del ducado de Sajonia-Weimar, invitó a Goethe a trabajar en Weimar, que en ese entonces era uno de los grandes centros intelectuales y literarios de Alemania, Goethe aceptó el trabajo y terminó su relación con Lili.
En Weimar, trabajó en distinguidos cargos de gobierno, en 1782 llegó a ser ministro de finanzas y fue consejero privado de Carlos Augusto, de ahí que escribió poco, entre lo cual destacaron poemas como “Canción nocturna del caminante” y “El rey de los elfos”.
Goethe comenzó una relación romántica con una Dama de la Corte llamada Charlotte von Stein, que influyó notablemente en su estilo, sus escritos se volvieron individualistas y románticos, y comenzó a escribir “Los años de aprendizaje de Wilhelm Meister”, que se publicó hasta 1795.
En 1779, Goethe viajó a Suiza y comenzó a estudiar la naturaleza, exploró campos de botánica, zoología, geología y mineralogía, y escribió “La teoría del color”.
Años más tarde, con la intención de conocer el mundo antiguo realizó el sueño de su vida y viajó a Italia para conocer ciudades como Sicilia, Nápoles, Parma y Roma, no sólo tenía la intención de conocer el arte sino también de educarse en el arte.
Durante su estancia en Italia aprendió pintura en acuarela y realizó alrededor de 850 dibujos, también aprendió modelado y continuó escribiendo obras como “Ifigenia” y “Egmont”, y comenzó a escribir “Tasso” y la primera parte de “Fausto”.
Goethe volvió a Weimar donde abandonó sus asuntos de gobierno y se convirtió en ministro de Cultura, también supervisó instituciones de ciencia y técnica como la Universidad de Jena y en 1971 comenzó a dirigir el nuevo Teatro de la Corte de Weimar, puesto que mantuvo hasta 1817.
Con el inicio de la Revolución Francesa, Goethe tomó inspiración y se atrevió a hablar sobre sus ideales políticos, destacan de este periodo obras como “Conversaciones de emigrados alemanes” (1795), “Los dramas de una revolución” y el poema épico “Hermann y Dorothe” (1797).
De acuerdo con información del portal "biografiasyvidas.com", Goethe comenzó un romance con Christiane Vulpius con quien se casó en 1806 y tuvo un hijo en 1789.
En 1794 conoció al poeta y dramaturgo Friedrich Schiller con quien entabló una gran amistad, le prometió que publicaría “Aprendizaje de Wilhelm Meister” y a la muerte de Schiller, el 9 de mayo del mismo año, cumplió su promesa.
Goethe realizó su último gran viaje a Suiza en 1797, decidió llevar a su esposa e hijo y pasar por su natal Frankfurt para presentarlos con su familia.
Durante sus últimas dos décadas de vida escribió “Poesía y verdad” (1811) donde describe su vida a partir de las memorias de su infancia, y entre 1819 y 1827 comenzó a escribir una docena de antologías “Diván de Oriente y Occidente”.
Cansado del trabajo, Goethe empleó como sus secretarios al historiador de literatura Friedrich Wilhelm Riemer (1774-1845) y al poeta Johann Peter Eckermann (1792-1854) y comenzó la segunda parte de su obra “Fausto”.
El 22 de marzo de 1832 un infarto agudo de miocardio sorprendió a Johann Wolfgang Von Goethe, quien falleció al instante en su hogar. Actualmente sus restos se encuentran enterrados en la Cripta Real en Weimar.