"El Palio actualmente no es una atracción turística y tampoco quiero que lo sea. Es normal que los turistas vengan a verlo (...) pero no es una atracción. De hecho el turista apresurado no conviene a la ciudad", dijo en rueda de prensa la alcaldesa, Nicoletta Fabio.
Sus palabras rebaten a las de la ministra de Turismo, Daniela Santanché, que recientemente había defendido que el Palio es "crucial para el turismo y la economía de la zona", irritando a la administración local.
La ministra sin embargo asistirá por primera vez a la competición, que tendrá lugar esta tarde a las 19:00 horas locales (17:00 GMT).
El Palio de Siena, una colorista tradición de siglos mezcla de competición hípica y fiesta popular, consiste en una carrera de caballos en la plaza de la ciudad en la que se enfrentan 17 "contradas" o distritos de la ciudad toscana.
Habitualmente se desarrolla dos veces al año: el 2 de julio, con una carrera dedicada a la Virgen de Provenzano, y el 16 de agosto, en honor a la Asunción de la Virgen.
Aunque sus orígenes son medievales, la primera edición se celebró en 1644 con una regulación estipulada que, en algunos aspectos, todavía es válida en las carreras actuales.
Esta pintoresca carrera de caballos ha sido suspendida en contadas ocasiones en los últimos siglos: por ejemplo, no se disputó durante las Guerras Mundiales así como durante la pandemia de coronavirus.
El gobernador de la Toscana, Eugenio Giani, apostó hoy por "retomar la iniciativa para lograr el reconocimiento del Palio de Siena como patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO".