Desde 1997, las 38,000 flores que cubren al perro de Jeff Koons descansan sobre una malla metálica que da forma a la escultura y que, junto con un sistema de riego integrado y varias capas de sustrato para nutrir a las plantas, han permitido florecer a 'Puppy' durante 24 años a las puertas del Museo.
Ahora, tras un “exhaustivo análisis técnico” realizado por el Departamento de Conservación del Museo, este “esqueleto” de acero interno requiere una restauración para asegurar su conservación futura, cuyo coste asciende a los 100,000 euros (120,000 dólares).
Para financiar dicho gasto, el Museo ha optado por solicitar la colaboración económica de la ciudadanía mediante una campaña de 'crowfunding' o micromecenazgo en la que cualquier persona puede convertirse en “mecenas” y donar la cantidad de dinero que quiera para la restauración de la escultura floral.
A través de la página web DaVidaAPuppy, quien lo desee podrán realizar su aportación económica de forma online y eligiendo el método de pago que prefiera (PayPal, Bizum o tarjeta de crédito).
El Museo ofrece una opción rápida de 15 euros de donación (unos 18 dólares), pero cada persona podrá establecer una cantidad mayor o menor a esa cifra si lo prefiere.
La iniciativa se ha activado este miércoles y en unas horas se ha recaudado un 1% del objetivo, aunque el director del Museo, Juan Ignacio Vidarte, ha aclarado que, de no llegar a los 100,000 euros previstos (120,000 dólares), el Guggenheim aportará la cantidad restante.
Es la primera vez que el Guggenheim utiliza esta vía de financiación, ya que hasta ahora habían seguido la vía tradicional mediante el presupuesto del propio Museo, que procede en un 30% de las subvenciones y en un 70% de los ingresos de los visitantes y las donaciones privadas, según ha explicado Vidarte.
“Puppy es una obra viva, una de las esculturas que más conectan con el público y patrimonio de todos los vecinos de la ciudad de Bilbao”, ha señalado Vidarte durante la presentación de la campaña.
La razón que ha esgrimido el director general para poner en marcha esta iniciativa de 'crowfunding' es la “estrategia de transformación digital” planteada por el Museo con el objetivo de “utilizar herramientas tecnológicas para mejorar su financiación”.
“La caída de visitantes con motivo de la pandemia ha supuesto un impacto, pero hemos absorbido ese impacto y no es la razón fundamental para optar por esta iniciativa”, ha asegurado.
Asimismo, ha añadido que “todo lo que mejore la financiación del Museo es beneficioso” y que este año era “el mejor momento” para embarcarse en nuevas formas de hacerlo.
La campaña estará activa durante todo el verano y el proceso de restauración de la escultura se realizará los meses de septiembre, octubre y noviembre, coincidiendo con el próximo cambio de flor de 'Puppy', cuando las flores de verano son sustituidas por las de invierno.
Vidarte ha insistido en que las aportaciones económicas que se realicen “encajan en el ámbito de la filantropía”, pero todos los donantes obtendrán una lámina digital con la fotografía de 'Puppy' a modo de reconocimiento.
Aquellos que donen una cantidad superior a los 100 euros (120 dólares) se convertirán en Amigo del Museo durante un año, lo que supone descuentos, actividades exclusivas y accesos gratuitos a las exposiciones.
Además, los donantes residentes en España podrán desgravar su donación rellenando sus datos para el certificado fiscal.
No es el primer museo en España que opta por el 'crowfunding'. En 2018 el Museo del Prado de Madrid lanzó una iniciativa de micromecenazgo con el objetivo de adquirir para su colección la obra "Retrato de niña con paloma", de Simon Vouet, campaña con la que recaudó 204,084 euros (243,000 dólares).