El curso es organizado por el espacio en línea “Regiones en expansión: Plataforma para la investigación y educación en arte, ciencia y cultura digital”, que dirige Edith Medina, quien explicó que la idea es generar en la población infantil otra perspectiva de la ciencia y el arte.
También, fomentar el conocimiento, el aprendizaje y la curiosidad para diseñar y construir a través de procesos lúdicos.
Para ello, dijo, el programa incluye temas de biología, dibujo natural, visualización con microscopios, imaginarios biológicos a través de papiroflexia, exploración naturalista y experimentación científica, que se abordarán en sesiones de 11:.00 a 14:00 horas, los días 16, 23 y 30 de julio, así como 6, 13 y 20 de agosto.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), “Biologías cotidianas: Micropaisajes urbanos” es uno de los módulos, en el cual los pequeños practicarán la exploración urbana a partir de elementos biológicos, aprenderán a ver con otra óptica lo que los rodea y construirán murales en hojas de papel, dijo Medina.
También, a transformar en arte los residuos que se generan en la cocina es lo que realizarán los participantes en otra de las sesiones. Con diferentes texturas, formas y colores elaborarán un collage.
Fernando Pizarro, integrante de Regiones en Expansión, enseñará a los niños que con elementos que creemos que son de desecho es posible generar sustentabilidad, como fabricar bioplásticos a partir de la leche, o textiles, de cáscaras de fruta.
Denisse Jiménez impartirá “Constelaciones biológicas: haciendo universos”, donde, a partir de la visualización microscópica de frutas y verduras, los niños trazarán lo que observaron en el microscopio en un mapa del universo.
Con imágenes tomadas del microscopio, Pizarro instruirá a los niños para que produzcan virus y bacterias de papel, los cuales guardarán en una caja de Petri. Utilizar elementos biológicos como si fuera un esténcil será otra de las actividades. Piedras, hojas y objetos con textura serán utilizados para imprimir.
En “Creación de herbarios”, detalló, los infantes aprenderán cómo hacer desde una prensa para secar plantas y flores, hasta un cuaderno donde las colocarán y catalogarán.
La idea, agregó Edith Medina, es que a partir de algo cotidiano puedan generar elementos biológicos, científicos y artísticos, y no piensen en la ciencia como algo inalcanzable que solo ocurre en los laboratorios.
“Queremos que experimenten, se vuelvan exploradores del mundo y aprendan a convertir cualquier cosa en una pintura, un dibujo o un collage. Les damos la posibilidad de experimentar que el arte no es inalcanzable ni la ciencia tampoco; que pueden ser lo que ellos decidan ser; que hay un panorama abierto”, refirió.
Edith Medina tiene más de una década de laborar en el campo del arte y la ciencia. Trabaja, por ejemplo, con lágrimas, fermentación de bacterias y biotextiles. En sus proyectos colaboran biólogos, físicos y artistas visuales, entre otros especialistas.
Para participar en una o todas las sesiones de Biología hecha a mano, los interesados deberán ser inscritos previamente en la Sala de Arte Público Siqueiros, ubicada en Tres Picos 29, colonia Polanco. El costo por sesión es de 100 pesos, y por las seis, es de 500 pesos, concluyó el INBA.