Se trata de Irais Bautista Guzmán, de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), quien fue reconocida por sus estudios relacionados con la viscosidad del universo durante sus primeros microsegundos de vida; así como Mónica Andrea López Hidalgo, de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), reconocida por sus estudios de las interacciones neuro-gliales que se relacionan con la pérdida de funciones cognitivas durante la vejez.
También se premió a la doctora Ana Sofía Varela Gasque, del Instituto de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) por su investigación para crear nuevos materiales que permitan reciclar el dióxido de carbono (CO2) y reducir así su impacto ambiental; de igual forma, se reconoció a la doctora Edna Leticia González Bernal, del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional Unidad Oaxaca del Instituto Politécnico Nacional (IPN), quien lidera un proyecto para la conservación de seis especies endémicas de ranas en la Sierra Norte de Oaxaca.
La quinta ganadora de las becas fue la doctora Luz María Alonso Valerdi, quien obtuvo el reconocimiento gracias a sus esfuerzos para generar un tratamiento acústico contra el tinnitus crónico y refractario. Durante la ceremonia de premiación, realizada en el Alcázar de Chapultepec, Nuria Sanz, directora y representante de la oficina de la Unesco en México, lanzó un llamado a seguir trabajando para potenciar el papel de la mujer en la ciencia y la cultura.
“Ya se ha apoyado a tantas generaciones de mujeres científicas, hemos dicho tanto sobre estadísticas que tienen que reflejar mejor el género, mejor los sectores, que debemos pensar también en el papel de la mujer en la cultura. Las mujeres en la cultura no tienen las cifras que representa su capital humano y capital científico”, dijo Nuria Sanz para después lanzar la propuesta de crear un programa de Becas L’Oréal en la Cultura.
El doctor Enrique Cabrero Mendoza, director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), también presente durante la ceremonia, aseguró que pese al rezago de la participación femenina en la ciencia, se han dado pasos importantes para revertir las cifras. “(A nivel licenciatura) las mujeres están subrepresentadas en los campos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas”, señaló.
No obstante, dijo, se va avanzando hacia la equidad, siempre reconociendo que aún falta mucho por lograr. “En el caso de Conacyt, trabajamos intensamente en esto, históricamente Conacyt ha trabajado en ello (…) De las más de 63 mil becas que actualmente se otorgan, 46.5 por ciento son para mujeres; de las becas al extranjero (seis mil aproximadamente), 42 por ciento son para mujeres; en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), 37 por ciento son mujeres; y en un nuevo programa, el de Cátedras para la Investigación, implementado hace apenas tres años, 42 por ciento son mujeres”.
Mónica Andrea López Hidalgo, quien habló en representación de las cinco becadas, se dijo agradecida por el reconocimiento, sobre todo por las oportunidades que hoy en día se abren para las mujeres a lo largo del camino hacia una carrera científica.
“Contamos con becas Conacyt todas nosotras, lo que nos permitió enfocarnos en nuestros estudios e investigación, ya que sin ellas simplemente habríamos abandonado la ciencia. Reconocemos, apreciamos y agradecemos la inversión que se ha hecho a nuestra formación con dinero de los impuestos de los mexicanos y como tal nos debemos a ellos”.
Finalmente, dijo que la coincidencia de la vida de muchas personas y el apoyo institucional fueron decisivos en su formación. “Es claro que para que una mujer pueda dedicarse a la ciencia en México se necesita de un núcleo familiar, una sociedad que lo impulse y el apoyo gubernamental para que lo materialice; si alguno de estos tres elementos no está, las probabilidades de éxito disminuyen”.