Una nueva y nítida vista infrarroja de la nebulosa de la constelación de Carina, situada en la zona sur de la Vía Láctea, fue captada por el telescopio Very Large Telescope (VLT) que el Observatorio Europeo Austral (ESO) tiene en el norte de Chile, informó hoy el organismo científico.
Esta nueva panorámica, obtenida desde el observatorio que la ESO posee en el cerro Paranal, en el desierto de Atacama, permite dar a conocer astros jóvenes y de luz débil que hasta hoy habían permanecido ocultos.
Situada a 7,500 años luz de la Tierra, la nebulosa Carina, formada por gas, polvo y estrellas jóvenes, está considerada por los astrónomos como una de las incubadoras de estrellas más cercanas a nuestro planeta y contiene algunos de los astros más brillantes hallados hasta el momento.
Para penetrar el denso polvo y capturar la imagen nítida y celeste de las estrellas que forman la nebulosa, un equipo de astrónomos europeos ha utilizado, además del telescopio VLT, la cámara infrarroja HAWK-I, a través de la cual se han combinado cientos de imágenes individuales.
Así, según el organismo astronómico, se ha obtenido el mosaico más detallado hasta el momento de la nebulosa, al captar no sólo las estrellas masivas más brillantes, sino también aquellas que antes permanecían invisibles.
Entre las estrellas que conforman esta formación se encuentra la Eta Carina, que durante el siglo XIX fue la segunda estrella más brillante de todo el cielo.
En la panorámica se muestra esta estrella rodeada por nubes de gas que brillan bajo el ataque violento de la radiación ultravioleta.
La imagen captó, además, la existencia de manchas compactas de material oscuro que, para los científicos, se tratan de nidos cargados de polvo en los que se están formando nuevos astros.
La ESO es una organización intergubernamental formada por 14 países europeos y Brasil, y en Chile opera otros dos observatorios, La Silla y Chajnantor.