Los expertos de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), unidad Zacatenco, señalaron que el desarrollo de esta película comestible, creada a través del uso de una pectina, un material que se encuentra en los subproductos de café, como el mucílago, se realizó en el laboratorio de investigación II del departamento de Ingeniería Bioquímica.
Las pectinas son biopolímeros de gran importancia en la industria alimentaria y dada sus propiedades y características son utilizadas como aditivos, sobre todo como espesantes y gelificantes en el procesamiento de alimentos, se informó a través de un comunicado
De acuerdo con la científica Georgina Calderón Domínguez, esta investigación científica busca generar un material comercial de uso industrial para mejorar e incrementar la vida de anaquel en el área de panificación o formar plásticos biodegradables con aplicaciones, tanto en el sector alimentario como para el sector farmacéutico.
Así como elaborar un proceso detallado desde el punto de vista ingenieril, estudiar todas las etapas, y qué se obtiene en cada una de ellas, para de esta forma tener las bases que permitan instaurar un proceso menos contaminante.
La científica aseguró que la finalidad del proyecto es apoyar la generación de un proceso tecnológico más eficiente al utilizar un subproducto del café, que generalmente se destina para alimento de ganado, proporcionándole de esta forma un mayor valor agregado, además de auxiliar en la reducción de la contaminación de ríos y mejoramiento del uso de agua.
La estudiante de doctorado en alimentos Mariana Valdespino León explicó que el mucílago se obtiene a partir de un proceso físico a través de un equipo denominado desmucilaginador.
“Se recupera de una solución acuosa, y se separa mediante precipitación luego de un proceso de hidrólisis. Parte del estudio está enfocado en obtener el mayor rendimiento”, anotó.
Asimismo, agregó, con el propósito de generar una biopelícula comestible de mejor calidad, se trabaja con una novedosa técnica denominada electrospraying que se realiza en colaboración con el doctor Eduardo Morales Sánchez del Centro de Investigación en Ciencia Aplicada y Tecnología Avanzada (CICATA), unidad Querétaro, la cual usa menos pectina, proporciona una mayor uniformidad y transparencia.
Indicó que esta tecnología (pulverización electrohidrodinámica) está basada en la atomización de líquidos por medio de fuerzas eléctricas. Este sistema tiene varias ventajas sobre los atomizadores mecánicos como el tamaño de las gotas (nanómetros o micrómetros) y una mejor distribución.
El equipo científico subrayó que otra ventaja es que no se requiere de una gran inversión para obtener la pectina de los desechos del café y subrayó que en lo que se refiere al electrospraying, “es una técnica poco usada, con alto potencial y pocos científicos la manejan para el desarrollo de películas. Somos los primeros a nivel mundial que reportamos su uso en el sector de alimentos".
Por último, los expertos destacaron que el objetivo a largo plazo es crear un empaque inteligente que indique cuándo ya no se puede consumir el producto.