La oficina regional auditó las cuentas de Nissan durante los años fiscales de 2011, 2012 y 2013 y concluyó que debería haber incluido como ingresos, y no gastos empresariales (que pueden deducirse), unos 150 millones de yenes (1.2 millones de euros o 1.4 millones de dólares), informaron este martes medios locales.
Según informaciones recogidas por diarios como Asahi y Yomiuri, el dinero se usó como parte de una donación a la universidad libanesa en la que se graduó Ghosn, de 65 años, y un contrato de consultoría con su hermana mayor, del que Nissan no tendría constancia.
La oficina de impuestos de Tokio consideró que dichos pagos no son gastos corporativos (deducibles de los ingresos), sino con fines privados, y exigió a la empresa el pago del ajuste tributario y un gravamen adicional a modo de multa que Nissan ya habría pagado tras presentar un informe fiscal revisado, según fuentes con conocimiento del asunto.
Preguntado al respecto, un portavoz de Nissan dijo a Efe que la empresa no puede comentar porque se trata de un proceso "en curso".
"La investigación interna de Nissan ha confirmado casos de mala conducta dirigidos por Ghosn. En el futuro, Nissan seguirá tomando las medidas necesarias, incluidas acciones legales para reclamar daños y perjuicios, para dar cuenta de la responsabilidad del expresidente y otros", señaló el portavoz.
Según los resultados de dicha investigación interna, publicados en septiembre, el expresidente Ghosn habría malversado más de 120 millones de euros de Nissan y la investigación de la oficina de impuestos de Tokio habría corroborado parte de esos hallazgos.
La autoridad tributaria sigue investigando declaraciones fiscales de períodos posteriores, por lo que podría reconocer más irregularidades e imponer a Nissan pagos adicionales.
La auditoría fiscal es independiente a los cargos presentados por la fiscalía de Tokio.
Ghosn, que se encuentra en libertad bajo fianza, está a la espera de que comience su juicio en Japón, donde está acusado de abuso de confianza agravado por malversar fondos de Nissan, así como de no declarar ante las autoridades financieras del país la totalidad de sus remuneraciones supuestamente pactadas con la compañía.