Para probar la eficacia de la movilidad eléctrica en condiciones reales, Skoda está cediendo diversas unidades del Octavia Green E Line a diversas compañías e instituciones, entre las que destaca el el Ministerio de Industria y el Ministerio de Medio Ambiente de la República Checa, las mayores compañías energéticas de Europa Central o la Universidad de Economía de Praga.
Además, desde junio, un trabajador de Skoda y su familia han estado usando un vehículo eléctrico diariamente y en breve se unirá una segunda familia que tendrá la oportunidad de probar uno de los vehículos durante seis meses tras el concurso organizado por Skoda a través de su página de Facebook.
Tras estos primeros kilómetros de testo, las pruebas de ensayo del Skoda Octavia Green E Line entran en una nueva fase. Otro reconocido socio, TÜV SÜD Chequia, utilizará un Octavia eléctrico para un proyecto de siete meses que incluye la medición de consumo y otros tests específicos.
Skoda espera que estas pruebas le suministren una perspectiva importante acerca de la adecuación de la propulsión eléctrica para un uso diario y su continua mejora.
TÜV SÜD usará el vehículo de forma diaria, realizando, entre otros, tests de consumo usando las mediciones estandarizadas basadas en la metodología TSECC (TÜV SÜD e-Car Cycle), que TÜV SÜD desarrolló específicamente para determinar el consumo de los vehículos eléctricos bajo condiciones de la vida real.
Para ello, la metodología tendrá en cuenta explícitamente el comportamiento del aire acondicionado y la calefacción, ya que estos y otros componentes eléctricos afectan de forma significativa a la autonomía de un vehículo eléctrico.
Los datos generados en el test ayudarán a hacer que el aire acondicionado y el resto de componentes sean más eficientes y contribuyan a que los vehículos eléctricos se adapten más a la conducción diaria.
Todos los Skoda Octavia Green E Line incorporan sensores especiales que permiten un control continuo de los parámetros más importantes del vehículo y del uso de los modos de conducción, la aceleración o la posición del coche en cada momento. Todos los datos se transmiten automáticamente vía UMTS a los especialistas del desarrollo técnico de la marca, que pueden analizar el uso del vehículo eléctrico y la carga real del sistema eléctrico en funcionamiento.
El Skoda Octavia Green E Line está basado en el Octavia Combi. Su motor eléctrico entrega hasta 115 CV (85 kW) y acelera el vehículo de 0 a 100 km/h en solo 12 segundos, con una velocidad máxima de 135 km/h.
La batería del vehículo es de litio y requiere cerca de dos horas y media para cargarse. Cuando está al máximo, el Octavia eléctrico tiene una autonomía de hasta 150 kilómetros, satisfaciendo así las necesidades de la mayoría de los usuarios europeos.