La multa se basa en un acuerdo de los comerciantes de Mercedes en la provincia de Jiangsu. Las autoridades chinas acusan a Mercedes-Benz y sus vendedores de acordar los precios para la clase E y S, así como el de algunas piezas de repuesto, dañando con ello tanto la competencia como al consumidor, informaron las autoridades chinas en un comunicado.
Un portavoz de Daimler afirmó hoy que Mercedes-Benz China acepta la decisión y se toma muy en serio la responsabilidad en relación al derecho de competencia. "Hemos adoptado todas las medidas adecuadas para poder continuar con el negocio en base a las leyes vigentes", declaró.
Las autoridades chinas investigan desde el pasado año la política de precios de los fabricantes automotriz y otras empresas del sector. Junto a las alemanas BMW y Audi, también se encuentran en el centro de las investigaciones la estadounidense Chrysler y proveedores japoneses.
China acusa a las automotrices de fijar precios en el país notablemente superiores en comparación a los Estados Unidos y Europa, lo que ha provocado que se abran investigaciones contra más de mil empresas relacionadas con el sector automotor. En especial investigan el mercado de coches de lujo dominado por Audi, BMW y Daimler. BMW y Audi ya fueron multados el pasado año.
Para Daimler, China es junto con Estados Unidos uno de los mercados más importantes. Sin embargo, su volumen de negocio se encuentra por detrás de sus rivales BMW y Audi.