Entre los capitalinos, las universidades públicas gozan de gran conocimiento, no obstante, las universidades privadas también tienen presencia entre los entrevistados. De las instituciones privadas, el Tecnológico de Monterrey (ITESM) es el centro educativo más conocido, 79 por ciento de los encuestados mencionó conocer la institución; detrás se ubican las universidades La Salle (76 por ciento) y la Iberoamericana (75 por ciento).
El Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), El Colegio de México (COLMEX) y, el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) son las instituciones académicas menos conocidas por los defeños.
Al preguntar por la imagen de las universidades, la percepción de los capitalinos difiere un poco con lo mencionado sobre el nivel de conocimiento. En este caso, las opiniones favorecen a la institución privada del Tecnológico de Monterrey, 94 por ciento de los entrevistados conciben al ITESM como la institución educativa con mejor imagen. En un segundo puesto, los entrevistados ubican al Politécnico Nacional (91 por ciento) y a la Autónoma Metropolitana (91 por ciento); y en tercer lugar se sitúa la Universidad Nacional Autónoma de México.
Otras diferencias resaltan al analizar la opinión de la población por grupo de edad. Los jóvenes de entre 18 y 25 años conocen más las distintas instituciones de educación superior que los capitalinos en general. La mayoría de los defeños (96 por ciento), que se encuentran en edad de cursar una carrera universitaria, saben de las escuelas públicas como la UNAM, IPN, y UAM. Cuatro de cada cinco entrevistados han escuchado del Tecnológico de Monterrey (92 por ciento), de la Universidad Iberoamericana (88 por ciento), de la Universidad La Salle y de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (82 por ciento respectivamente), y de la Universidad Anáhuac (78 por ciento); todas ellas de carácter privado, con excepción de la Autónoma de la Ciudad de México (UACM). Nuevamente, el Colegio de México y el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) son las universidades menos populares entre los capitalinos de 18 y 25 años.
Para los jóvenes, la UNAM y la UAM son las instituciones académicas con mejor opinión (96 por ciento respectivamente); a estas universidades le siguen el ITESM (92 por ciento), el COLMEX (90 por ciento), el ITAM (89 por ciento), y el IPN (88 por ciento) cuya imagen -en esta ocasión- resultó menos favorecida.
Si bien, la proporción de la opinión depende del porcentaje de conocimiento, este no es determinante. Por ejemplo, en el estudio de Parametría, la UNAM es la universidad más conocida, pero no por eso es la mejor percibida por los entrevistados en general.
Asimismo, cabe señalar que esta valoración resulta de las opiniones de la población, de cómo los encuestados conciben las instituciones universitarias en el Distrito Federal, y no de una exhaustiva evaluación a la calidad educativa que las escuelas de nivel superior brindan (planes de estudio, carreras que ofertan, investigación científica que realizan, aportes hechos a la comunidad, número de publicaciones académicas y científicas hechas a nivel nacional e internacional, número de autores citados a nivel internacional, egresados, de su reputación entre empleadores etc.). Es decir, la imagen que la sociedad tiene de las universidades es independiente y ajena a la calidad educativa de éstas.
No obstante, algunos indicadores coinciden con la percepción de los citadinos. A nivel local, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey (ITESM), el Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y la Universidad de las Américas en Puebla (UDLAP) encabezan el Segundo ranking de Mejores Universidades de México realizado por América Economía Intelligence. De acuerdo con los datos recabados en el estudio, la UNAM mantiene el título de mejor universidad del país, al igual que las 5 universidades que le siguen y que conservan las mismas posiciones en las que fueron ubicadas en 2012.
Estas instituciones de educación superior no sólo son consideradas como las mejores dentro del país, también tienen presencia a nivel internacional. La UNAM, el ITESM, el IPN, la Universidad Iberoamericana, el ITAM, la UAM y la Universidad de las Américas de Puebla se encuentran dentro de las 50 universidades más destacadas de América Latina. De acuerdo con el estudio anual QS University Rankings: Latin America 2013, pese a que la Universidad Nacional Autónoma de México ocupa el sexto y el Tecnológico de Monterrey el séptimo puesto en el top 10 de 300 escuelas. México aún no es una potencia en la región. Brasil domina la tabla con 81 instituciones en el listado, y cuatro de ellas se ubican dentro de las primeras diez, incluida la Universidad de Sao Paulo (USP), la cual consolida su posición como primera universidad de Latinoamérica, por tercer año consecutivo.
A nivel internacional, la UNAM es la única institución educativa que figura dentro de las 500 mejores universidades del mundo. La clasificación elaborada por la Universidad Jiao Tong de Shanghai (China) es una de las más importantes en el área académica y se denomina Academic Ranking of World Universities (ARWU), se realiza desde 2003, analiza a 12 mil instituciones del mundo y clasifica a 500, principalmente desde la perspectiva del impacto internacional de la investigación producida en el seno de las universidades. Desde 2004 la UNAM –junto con la Universidad de Sao Paulo (Brasil)- destacan entre las primeras doscientas universidades del mundo. En 2012, este ranking otorgó el lugar 151 a la Universidad Nacional Autónoma de México.
La UNAM es considerada por distintos observadores en el mundo como una de las universidades con más prestigio en el país, lo que podría explicar el que la mitad de los capitalinos (55 por ciento) prefiera estudiar en una institución pública que en una privada, sólo 4 de cada 10 defeños (38 por ciento) estudiaría una carrera en una universidad privada. Los costos para solventar una educación privada puede ser el otro factor que influya en la preferencia de escuelas públicas.
Sin embargo, las cifras de la encuesta en vivienda de Parametría muestran que las preferencias de la población de la Ciudad de México difieren de la opinión que se tiene de los empleadores y de la oferta laboral. Cinco de cada diez capitalinos (47 por ciento) piensan que las empresas al contratar personal dan prioridad a los egresados de universidades privadas; 3 de esos 10 entrevistados (26 por ciento) opinan que los egresados de escuelas privadas y públicas reciben el mismo trato; sólo 2 de cada 10 encuestados (19 por ciento) afirman que los graduados de instituciones públicas tienen trato preferencial en las empresas.
Estas diferencias aumentan al cruzar la preferencia educativa con la percepción de los empleadores; la opinión de los capitalinos que optarían por una universidad pública para estudiar está dividida equitativamente; en contraste, 70 por ciento de aquellos que prefieren una institución privada creen que los egresados de estas universidades tienen prioridad ante las empresas empleadoras, es factible decir que en esa creencia radica la predilección por las universidades privadas o de paga. Dicha valoración es dominante sobre todo entre los jóvenes y adultos entre 36 a 45 años de edad.
Diversos factores ayudan a entender porque la UNAM, el IPN y la UAM -dentro de las instituciones públicas- son las universidades más demandadas por los jóvenes que desean ingresar a una institución educativa, asimismo no puede ocultarse el problema de cobertura existente.
Las universidades ubicadas en la ciudad de México y zona metropolitana son las que reciben más estudiantes a nivel nacional y no están en condiciones de cubrir las necesidades de formación de los jóvenes del país.
Año tras año queda al descubierto la insuficiencia de la oferta educativa de nivel superior. En los últimos días, el actual subsecretario de Educación Superior, Fernando Serrano Migallón, reconoció la falta de oportunidades de estudio y calculó que aproximadamente 100 mil jóvenes quedaron fuera de alguna de las universidades públicas como el Instituto Politécnico Nacional, la Universidad Autónoma Metropolitana y la Universidad Nacional Autónoma de México. Y, anunció -como alternativa- el Programa Emergente de Matricula de Educación Superior (PROEMES) de la Secretaría de Educación Pública (SEP), con la cual se ofrecen 36 mil 376 nuevos puestos en instituciones educativas públicas y privadas.
Es así que la educación superior, no sólo en la Ciudad de México, si no en el país -con todo y programa emergente- está acotada; la creciente demanda de educación superior hace de la oferta una prioridad para el gobierno federal, quien debe “propiciar la creación de más instituciones de educación superior” que sean verdaderas alternativas de desarrollo personal y crecimiento económico.