"La princesa Mako siempre ha sido muy querida por ambos, el emperador y la emperatriz emérita (Akihito y Michiko), así que lamentarán profundamente tener que despedirse de ella por su partida de la Familia Imperial el próximo día 26 de este mes", publicó en un comunicado hoy la Agencia de la Casa Imperial con motivo de la efeméride.
La princesa Mako, de 29 años, celebrará una boda civil en apenas una semana con su prometido, Kei Komuro (30 años), siendo la primera princesa del Japón de posguerra que rompe la tradición, sin ceremonia formal.
Mako también es la primera que renuncia a la dotación de 150 millones de yenes (1.13 millones de euros) que se concede a las mujeres de la Familia Imperial al contraer matrimonio y abandonar la institución.
En el comunicado, la Agencia de la Casa Imperial de Japón, también detalló la situación actual de la emperatriz Michiko, quien lleva una vida tranquila junto a su esposo, el emperador emérito Akihito y que se ha mantenido aislada en este último año con motivo de la pandemia.