Según Dempsey, para desplazar a los extremistas del EI de sus bastiones en el norte y este de Siria se necesitarán entre 12,000 y 15,000 combatientes.
La semana pasada, el Congreso de Estados Unidos aprobó la entrega de armas y el entrenamiento de 5,000 combatientes sirios.
"5,000 nunca fue la cifra final", señaló Dempsey, que apuntó que los actuales bombardeos de Estados Unidos y sus aliados en Siria no alcanzan para derrotar a los yihadistas.
"La campaña contra el EI en Siria debe tener un componente en tierra y creemos que la forma de alcanzarlo es a través de la oposición siria", añadió.