El encuentro reúne a activistas y delegados de gobierno de todo el mundo para evaluar la implementación de ese Acuerdo que fue adoptado por la Asamblea General de la ONU en 2006.
La Convención pretende asegurar que los 1,000 millones de personas con discapacidad, el 15 por ciento de la población mundial, disfrute de todas las libertades fundamentales.
El embajador de Corea ante Naciones Unidas, Oh Joon, preside la reunión:
"Tenemos razones para celebrar, pero también somos conscientes de que podemos mejorar para alcanzar los objetivos de la Convención y poner en práctica los derechos de las personas con discapacidad. Debemos trabajar arduamente y todos juntos para asegurarles igualdad de oportunidades en todos los aspectos del desarrollo de las sociedades", dijo el diplomático.
Los Objetivos de Desarrollo hacen referencia al tema en varios puntos, incluido el acceso a la educación, el crecimiento y el empleo (para promover el trabajo decente y la igualdad de remuneración para todos),la reducción de la desigualdad y la accesibilidad de los asentamientos humanos, entre otros.
