El director de la Fundación AXA, Josep Alfonso, señaló que “la soledad es un problema social, económico y sanitario de las sociedades modernas que requiere una actuación urgente por parte de todos”.
Un informe titulado “La Soledad en España” reveló que más de la mitad de la población española se siente sola en algún momento del año, fenómeno que se agudiza en periodos como las fiestas decembrinas.
“Identificar las señales de alerta, activar las relaciones sociales y mostrarse activo son sólo tres ejemplos de las cosas que podemos hacer”, recomendó Alfonso.
La Fundación AXA impulsó el primer “Informe sobre la soledad” en 2015, junto a la Fundación Once, desde entonces se ha prestado especial atención a este fenómeno social y del que nació un decálogo contra la soledad en Navidad (#adiósSoledad).
La fundación llama a prestar especial atención a las mujeres mayores y solteros desempleados como los sectores de la población más susceptibles de sentirse solos.
La implementación de las nuevas tecnologías cambió el patrón de socialización al permitir, por ejemplo, que personas que se sienten solas combatan esta situación.
Alfonso apuntó que “el uso intensivo de las redes sociales puede ser también un síntoma de que hay personas que se sienten solas y buscan salir de esta situación a través de sus perfiles virtuales”.
Esta situación, es especialmente preocupante en el caso de jóvenes, en quienes el sentimiento de soledad suele aparecer junto a la etapa de la adolescencia.
Para el 75 por ciento de los españoles, los mayores y jubilados son los colectivos más proclives a sufrir la soledad.
Las personas sin hogar o en situación de riesgo de pobreza o exclusión y los desempleados son también los sectores de la población más sensibles a poder experimentar este sentimiento.
El llamado decálogo contra la soledad destaca que la ausencia de comunicación es una señal de alerta ante la soledad; es necesario prestar especial atención a las personas mayores, a los que viven solos, enfermos o discapacitados y es importante no confundir la soledad con el duelo o la depresión.
Asimismo, señala que es importante activar las relaciones sociales, incluso las que ponen a disposición las instituciones; vivir acompañado es la herramienta perfecta, aceptar invitaciones o proponerlas; practicar algún deporte, activar hobbies en esta época del año.
También recomienda mantenerse intelectualmente activo; los animales de compañía son un buen antídoto; utilizar las nuevas tecnologías para conectarte con personas del entorno y participar en acciones de voluntariado.