Hasta ahora se confirmaron 119 infecciones, de las que 40 desembocaron en el fallecimiento de los pacientes. En el 2 por ciento de los casos se trató de peste neumónica, una de las enfermedades infecciosas más mortales, según la OMS. La peste bubónica puede ser tratada con éxito con antibióticos si es diagnosticada a tiempo. El actual brote de peste se detectó en siete regiones, también en la capital, Antananarivo, donde se confirmaron dos casos y uno de ellos acabó con la muerte del paciente.
"Hay un elevado riesgo de que la enfermedad se extienda con rapidez, debido a la elevada densidad de población de la ciudad y a la fragilidad del sistema sanitario", afirmó la OMS en un comunicado.
La situación es aun más complicada por el alto nivel de resistencia que existe en el país al deltamethrin, el insecticida que se suele utilizar para luchar contra la pulga de los roedores que transmite la enfermedad entre animales y también de estos a los seres humanos.
El gobierno y la OMS trabajan en forma conjunta para evitar una mayor propagación de la enfermedad infecciosa y ya se adoptaron varias medidas.
En Madagascar, un país muy pobre, se producen a menudo brotes de peste. En 2011 y 2013 murieron varias decenas de personas como consecuencia de esta enfermedad. En la época de lluvia que va de noviembre a abril, muchas ratas se refugian en los pueblos y ciudades de Madagascar.
Los síntomas de la peste neumónica son fiebre alta, dolores de cabeza, asfixia, tos y esputos de sangre. Después evoluciona a edema pulmonar y se producen fallos circulatorios. La peste neumónica se transmite de persona a persona a través de la tos.
La OMS registra cada año entre 1,000 y 2,000 casos de peste. En 2010 se registraron casos en Perú y en agosto de 2009 hubo varias muertos por peste en China. En 2006 murieron 50 personas en la República Democrática del Congo, donde las autoridades detectaron 1,174 casos sospechosos.