"A mitad de la semana pasada teníamos cuatro, el cierre de fin de semana confirmamos (que eran) ocho defunciones por el virus respiratorio tipo influenza", dijo a los periodistas la directora general de Salud del Ministerio de Salud (Minsa), Itza Barahona de Mosca.
De estas defunciones solo un paciente era un caso importado, un viajero que provenía de Brasil y que tuvo que bajar en Panamá por complicaciones respiratorias, explicó la funcionaria de Salud.
En cuanto a los casos locales, dos eran adultos con un cuadro de problemas crónicos complicados: diabetes y de enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Las otras cinco víctimas eran niños, tres de ellos de la comarca Ngäbe Buglé "con muy malas condiciones de vida", según la directora general de Salud.
La funcionaria no dejó claro si estos ocho decesos son todos los que se han registrado este año por causa del virus de la influenza en Panamá.
Pero sí exhortó a la población a que acuda a vacunarse, en especial los menores de cinco años de edad y los mayores de 60 años que sufren de enfermedades crónicas, ya que, destacó, "si bien el comportamiento todavía es normal, el riesgo existe y el virus de la influenza está circulando en todo el país".
El ministro panameño de Salud, Miguel Mayo, indicó que las cepas de la influenza pueden variar de un año a otro, por lo cual dijo que es recomendable aplicarse la siguiente vacuna al otro año para aumentar la protección.
"Así que lo ideal es que todo el mundo se vacune, ya que la vacunación no hace daño", afirmó Mayo, no obstante adelantó que se ha pedido un estudio sobre la efectividad de la vacuna actual al Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud.
Las autoridades de Salud no precisaron cuántas personas se han vacunado.