El PIB británico crece un 0.7% en el segundo trimestre

El producto interior bruto (PIB) del Reino Unido creció un 0.7 por ciento en el segundo trimestre del año frente a los tres meses anteriores, aupado por el sector de la construcción y un aumento del consumo, confirmó hoy la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS).

La ONS presentó hoy su tercera y última evaluación del PIB correspondiente a abril, mayo y junio, que confirma el crecimiento del 0.7 por ciento que ya anticipó en su anterior estimación del pasado agosto.

La Oficina indicó que la economía británica avanzó gracias a un aumento de la actividad del sector de la construcción y un incremento del consumo, sobre todo la compra de vehículos.

El gasto de los hogares subió un 0.3 por ciento en el segundo trimestre, algo menos que el 0.4 por ciento estimado anteriormente, pero aún así un avance significativo, pues se trata del séptimo aumento trimestral consecutivo.

La ONS también revisó hoy, en este caso al alza, las cifras de crecimiento del PIB relativas al primer trimestre del año, que aumentó al 0.4 por ciento frente al 0.3 por ciento previo.

La progresiva subida del PIB británico en los dos primeros trimestres de 2013 hace pensar a los analistas que el crecimiento de la economía puede consolidarse en el tercer trimestre -entre julio y septiembre-, unos datos que se espera se conozcan en octubre.

"Parece probable otra aceleración del crecimiento en el tercer trimestre, en lo que parece una recuperación fundamentada en una base cada vez más amplia y sostenible", opinó Chris Williamson, economista jefe de la empresa de análisis financiero Markit.

La tendencia al crecimiento es una buena noticia para el gobierno del conservador David Cameron, que desde 2010 ha aplicado una dura política de austeridad con la prioridad de reducir el déficit, que ha implicado recortes en los servicios públicos y la precarización del mercado laboral.

Los tipos de interés bajos -en el 0.5 por ciento- y la progresiva recuperación del sistema bancario han propiciado un aumento de la concesión de créditos, lo que a su vez está impulsando el mercado inmobiliario, hasta el punto de que el Banco de Inglaterra está "atento" a la posible creación de una burbuja.

El desempleo en el Reino Unido, actualmente en el 7.7 por ciento, mantiene una tendencia a la baja, debido al aumento de los contratos a tiempo parcial y por horas.

Aunque el gobierno británico ha conseguido reducir algo el déficit presupuestario, no ha alcanzado todavía su principal reto, reducir la deuda neta acumulada, que llegó en agosto a 1.19 billones de libras (1.41 billones de euros), un 74.6 por ciento del PIB.