Greenwald, primero en destapar el escándalo sobre el espionaje estadounidense y quien reside en Río de Janeiro, afirmó que la interceptación de datos electrónicos y telefónicos en todo el mundo es usada por Estados Unidos no sólo para combatir el terrorismo sino también para obtener ventajas comerciales e industriales.
El periodista británico, en una audiencia pública convocada por la Comisión de Relaciones Exteriores y Defensa Nacional del Senado brasileño, agregó que el país que le otorgue asilo al extécnico de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de Estados Unidos también tendrá acceso a esos datos confidenciales, ya que Snowden posee miles de documentos.
Greeenwald, responsable por publicar los primeros documentos filtrados por Snowden sobre los programas secretos estadounidenses de espionaje electrónico, aseguró que tales datos confidenciales son obtenidos por las cerca de 70,000 personas que trabajan en los servicios de inteligencia de Estados Unidos.
El periodista reiteró que Snowden, al que Rusia le ofreció un asilo provisional, le entregó entre 15,000 y 20,000 documentos, cuyo contenido se abstuvo de divulgar, y dijo que lo publicado hasta ahora se refiere a una porción muy pequeña de esos datos.
"Con seguridad habrá más revelaciones sobre el espionaje de Estados Unidos en todo el mundo, incluyendo países aliados, así como sobre la interceptación de sistemas de comunicaciones, incluyendo América Latina", afirmó.
"Hay documentos con informaciones aún más explosivas", afirmó.
Según Greenwald, ese elevado número de documentos obedece a que las agencias de inteligencia necesitan autorización judicial para espiar a ciudadanos estadounidenses pero no a los de otros países.
Según el columnista de The Guardian, uno de los riesgos es la falta de control sobre el uso que los agentes de las agencias de inteligencia le dan a las informaciones sensibles a las que tienen acceso.
Agregó que las empresas de telefonía e internet como Google, Microsoft y Apple ofrecen las informaciones de no estadounidenses solicitadas por la NSA y por la CIA sin cuestionar nada, y que esas agencias protegen con mucho cuidado el nombre de las empresas colaboradoras.
De acuerdo con el periodista, el Gobierno brasileño tiene herramientas para descubrir cuáles de esas empresas están interceptando llamadas telefónicas y correos electrónicos de ciudadanos brasileños.
Snowden abandonó el pasado 1 de agosto el aeropuerto de Moscú en el que permaneció atrapado casi un mes y medio en espera de que las autoridades rusas le otorgaran el asilo temporal. Desde entonces, se desconoce el paradero del hombre reclamado por la justicia de Estados Unidos. (EFE)