"No se desarrolla una sociedad sin tener las bases fundamentales para conocer la estructura subyacente de la ciencia", indicó en una entrevista con Efe Englert (Bruselas, 1932), que hoy participó junto a Higgs (Newcastle, 1929) en una conferencia organizada en el Parlamento Europeo (PE) por el panel que asesora a los eurodiputados en asuntos científicos, STOA.
"Si no se tiene ningún conocimiento sobre investigación fundamental, se destruye el pensamiento creativo", y sin ello, dijo, "al final, simplemente se copian cosas que han hecho otros pero no se hará nada nuevo".
Englert por una parte, junto al físico belga Robert Brout -ya fallecido-, y Higgs, por la suya, predijeron en 1964 al mismo tiempo y de manera independiente la existencia del que se ha popularizado como "bosón de Higgs", la partícula con la que interactúan otras partículas que hace que, en ese mecanismo, "adquieran" una masa determinada.
Casi cincuenta años después, el Centro Europeo de Física de Partículas (CERN) anunció en julio pasado la confirmación experimental de que el bosón existe.
Higgs, que aseguró a Efe sentirse "sorprendido" por la "gran" reacción pública que ha suscitado el hallazgo, reconoció el "éxito" de los responsables del CERN encargados de dar a conocer la noticia.
"Lo que me preocupa es que, si hay demasiada concentración en este descubrimiento particular, existe el peligro de que quizás el público no se dé cuenta de para cuántas otras cosas se ha construido" el gran colisionador de hadrones (LHC) donde se efectuó el experimento del CERN.
"Siempre es un riesgo cuando hay dificultades financieras, como es actualmente el caso. Algunas personas dirán, bueno, estas partículas han sido descubiertas, ¿por qué están usando esta máquina tan cara, por qué no la cierran?", afirmó Higgs.
Englert consideró que los recortes en ciencia podrían suponer "una catástrofe" que podría llevar a la "desintegración no sólo de Europa, sino también de todos los países desarrollados", en tanto que Higgs auguró una ralentización de los resultados.
"Es peligroso recortar el presupuesto en ciencia de manera que se reduzca el suministro de científicos formados que trabajan en proyectos que puedan tener un impacto económico mayor, y ayuden a salir de la crisis económica", señaló Higgs.
Los dos científicos destacaron las dificultades de España, y Englert insistió en que "no hay que tomar medidas irreversibles que hagan que no se produzca nunca una recuperación. Hay que ser extremadamente cuidadoso".
"Los políticos suelen pensar en los progresos inmediatos que se pueden hacer. Eso es inevitable en tiempos de crisis, como está sucediendo en España", opinó.
Higgs valoró los esfuerzos para crear el LHC, ya que, cuando formuló su teoría, "no estaba claro" que a lo largo de su vida pudiera conocer una máquina lo suficientemente potente para probar la existencia del bosón (partícula).
"Es bueno seguir vivo cuando ha ocurrido" el hallazgo, bromeó Higgs, que se declaró "satisfecho".
"El descubrimiento es esencialmente la finalización de la verificación del modelo estándar de la física de partículas", indicó, pero al mismo tiempo afirmó que abre un camino a teorías que "van más allá", como la de supersimetría, que podrían ayudar a entender otros "enigmas" de la composición del Universo, como la desconocida materia oscura, que forma más del 90 por ciento del cosmos.
Preguntado por una aplicación real e inmediata del hallazgo, Englert aseguró que definitivamente "no se puede utilizar para desarrollar un nuevo tipo de pasta de dientes".
"El desarrollo de la investigación fundamental, después de todo, nos ha dado todas las cosas que nos rodean, son consecuencia de la investigación fundamental, pero no ocurrieron de un día para otro, se necesita tiempo", precisó, y puso de ejemplo el descubrimiento de la electricidad o la mecánica cuántica.
"Más importante en esencia que esta aplicación, es mostrar la importancia de expandir el conocimiento, tener una mirada racional de las cosas", concluyó.