"Ayer acababa el plazo para los interesados en presentar ofertas indicativas, lo que implica que deben explicar qué quieren comprar", afirmó hoy en rueda de prensa en Gotemburgo Hans Bergqvist, uno de los administradores judiciales.
Bergqvist resaltó que la actividad en las últimas horas ha sido "febril" y confirmó que la inversora turca Brightwell Holdings se ha retirado de la puja por un desacuerdo con General Motors, antigua dueña de Saab Automobile y propietaria aún de las licencias técnicas, como habían adelantado horas antes medios suecos.
La china Youngman, que ya quiso comprar Saab antes de su quiebra, es una de las que ha presentado una oferta, según ha confirmado la propia compañía públicamente.
Los administradores reiteraron que buscan una solución para vender de forma conjunta Saab Automobile y sus filiales Saab Automobile Tools y Saab Powertrain, que implique reanudar la producción industrial en la fábrica de Trollhättan (al sur de Suecia), aunque no necesariamente de coches.
"Tenemos un plan en nuestras cabezas sobre cómo debe hacerse, pero no es algo que vayamos a revelar por motivos comerciales", dijo Bergqvist, quien no quiso hablar de plazos concretos para cerrar un acuerdo de venta.
La holandesa Swedish Automobile (SWAN), dueña del fabricante sueco, presentó en diciembre una solicitud de quiebra de su filial por no poder asegurar la viabilidad económica de la empresa, que atraviesa por graves problemas desde hace casi tres años.