En su decisión comunicada este martes, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) hace notar que Rusia no ha respondido a una serie de demandas que le hizo y no ha querido participar en el procedimiento desde que fue expulsada del Consejo de Europa en abril de 2022 por su invasión de Ucrania.
"Ante tal silencio persistente -concluye- el tribunal estima que el Gobierno ruso no quiere seguir manteniendo su demanda".
Además de esa razón formal por la supuesta falta de interés de Moscú, el TEDH también indica que no hay motivos relativos al respeto de los derechos humanos que justifiquen proseguir instruyendo este caso.
El argumento que da es que las denuncias que Rusia había incluido en esta demanda interestatal ya están siendo tratadas en las alrededor de 8,500 individuales que están pendientes por hechos ocurridos en Ucrania desde 2014.
Particularmente en Crimea y en su puerto de Sebastopol, así como en diversas zonas del este de Ucrania, donde Moscú afirmaba que se habían violado los derechos de diferentes grupos de la población, y sobre todo de los de lengua rusa.
Una parte de las 8,500 denuncias a las que se refiere el TEDH van dirigidas contra Ucrania, pero también hay muchas contra Rusia y otras contra los dos Estados al mismo tiempo.
Al margen de esas individuales, Ucrania ha interpuesto cuatro demandas interestatales contra Rusia.
Se refieren a la ocupación de Crimea; al vuelo MH17 de Malaysia Airlines entre Amsterdam y Kuala Lumpur que fue derribado por un misil cuando sobrevolaba el territorio ucraniano ocupado por Rusia el 17 de julio de 2014 (murieron los 298 ocupantes); a un incidente naval en noviembre de 2018 en el estrecho de Kerch, y al asesinato de oponentes al régimen de Vladímir Putin.
Aunque Rusia dejó de ser miembro del Consejo de Europa en abril de 2022, el TEDH (que depende de él) sigue siendo competente para tratar denuncias que tengan que ver con Rusia por supuestas violaciones de los derechos humanos y que hayan ocurrido hasta septiembre del pasado año.
