"Por supuesto, todos estamos esperando con interés las señales que el señor Macron trae desde Moscú", señaló en una rueda de prensa conjunta con los ministros de Exteriores de la República Checa, Jan Lipavsky; de Austria, Alexander Schallenberg; y de Eslovaquia, Ivan Korcok.
"Pero lo he dicho muchas veces, incluido ayer: estamos abiertos al diálogo, somos constructivos, buscamos una solución diplomática, pero no cruzaremos nuestras líneas rojas y nadie nos puede obligar a cruzarlas", recalcó Kuleba.
El presidente de Francia ya llegó a Kiev, donde se reunirá este martes con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski.
El lunes en el Kremlin, intentó apaciguar a Putin con promesas de un "nuevo mecanismo de seguridad" en Europa, a cambio de una desescalada en la frontera con Ucrania, donde Rusia tiene desplegados unos 100,000 soldados y ha generado el temor de Occidente a un ataque inminente.
Las garantías de seguridad exigidas por Rusia incluyen poner freno a una mayor expansión de la Alianza, en particular a Ucrania y Georgia, el cese de toda cooperación militar con las antiguas repúblicas soviéticas y la retirada de las tropas y armamentos de la OTAN a las posiciones que ocupaban antes de 1997.
A su vez, Lipavsky, Schallenberg y Korcok, que visitaron además la línea de separación en el Donbás, donde se enfrentan desde 2014 los separatistas prorrusos y el Ejército ucraniano, reiteraron la libertad que tiene Ucrania para elegir su propio destino, en referencia a su deseo de integrarse en la OTAN y la Unión Europea (UE).
El ministro eslovaco consideró que la anexión por parte de Rusia en 2014 de la península de Crimea no tenía nada que ver con las aspiraciones de Ucrania de convertirse en miembro de la OTAN, por lo que la amenaza rusa actual no tiene lógica.
"Ucrania es libre de elegir su destino con respecto a Occidente", recalcó, en tanto que Schallenberg y Lipavsky destacaron que "la seguridad de Ucrania es la seguridad de Europa".
"Este no es un viaje feliz. Es para reiterar el apoyo europeo y la solidaridad europea a la integridad territorial de Ucrania", señaló el ministro austríaco, quien alabó el "enfoque prudente" de Zelenski en la actual situación de tensión al tener que buscar "un equilibrio difícil entre la seguridad militar y la estabilidad macroeconómica".
Schallenberg asimismo reiteró su apoyo a las negociaciones en el Formato de Normandía para la paz en el Donbás, compuesto por Francia, Alemania, Rusia y Ucrania.
"No esperamos una solución rápida, pero no queremos una agresión militar", subrayó, y defendió que el principio de la indivisibilidad de la seguridad es un camino de doble sentido que también debe cumplir Rusia.